Ejercicio de Reiki Japonés
Hikari no kokyu-ho (Respiración Luminosa)
Es una técnica para reducir el estrés y para purificar la mente y el cuerpo.
- De pie o sentado, cierra los ojos y respira lenta y naturalmente. En este ejercicio, se explica esta técnica en la posición sentado en una silla.
- Ponte en posición de Gassho y tranquiliza la mente. Respira lentamente, sin causar ninguna tensión. Inhala y exhala por la nariz. Si te encuentras cómodo exhalando por la boca, puedes hacerlo. Lo importante es que respires naturalmente.
- Conéctate con la energía del Reiki, levantando los brazos, entreabiertos y estirados por encima de la cabeza, y las palmas de las manos mirando hacia el frente. Siente que te conectas con el universo y que el Reiki fluye por todo tu cuerpo, y que te fundes con la energía que emana por las palmas de las manos.
- Siente que todo el cuerpo está envuelto por la energía.
- Lentamente, bajas las manos a los muslos y colócalas con las palmas hacia arriba, y mantén las manos relajadas como si tuvieras un par de huevos en ellas.
- Lleva la atención al Tanden y escucha tu respiración.
- Mientras inhalas, visualiza que la energía blanca de Reiki llena tu cabeza y baja al Tanden. Desde el Tanden la energía se extiende a todos los órganos y a todas las células de tu cuerpo. Siente que el proceso de la sanación está ocurriendo. Mientras exhalas, visualiza que la luz que llenó todo tu cuerpo emana por la piel y llega a ser parte de tu aura, y después se extiende al infinito. Al mismo tiempo, suelta cualquier tensión.
Continúa con este ejercicio durante un rato.
Ponte en posición Gassho.
Si te sientes cansado después de realizar este ejercicio de respiración puedes acostarte. Si por el contrario, quieres despertarte totalmente, mueve las muñecas en todas las direcciones para despejar la mente (haciéndolas rotar).