La dieta tradicional china
La dieta constituye un elemento muy importante dentro de la medicina tradicional china. Los chinos consideran que la mayoría de los alimentos son medicinales, y que si se sigue una dieta adecuada, se realiza un poco de ejercicio, se hacen ejercicios respiratorios y se cuida la higiene personal, se pueden remediar las dolencias leves.
La dieta tradicional china clasifica los alimentos en diferentes categorías. La fundamental es la del yin y el yang, pero a ella se asocian las cuatro energías, los cinco elementos, los cinco sabores y el movimiento del chi. Dichas categorías se vinculan entre sí de una forma bastante compleja, y se tienen todas muy en cuenta a la hora de recomendar una dieta adecuada.
La dieta tradicional china clasifica los alimentos en diferentes categorías.
La fundamental es la del yin y el yang, pero a ella se asocian las cuatro energías, los cinco elementos, los cinco sabores y el movimiento del chi. Dichas categorías se vinculan entre sí de una forma bastante compleja, y se tienen todas muy en cuenta a la hora de recomendar una dieta adecuada.
En medicina china el Yin Yang de la dieta se conoce como trofología. El equivalente científico occidental del equilibrio Yin / Yang en la combinación de los alimentos, es el equilibrio ácido - básico o "PH". Sabemos que si añadimos una medida de ácido a una igual de álcali, la solución química resultante es neutra De allí que se use tomar bicarbonato (sustancia alcalina) para aliviar la acidez de estómago.
Está comprobado científicamente que para iniciar la buena digestión de cualquier proteína animal concentrada, el estómago debe secretar pepsina. Pero también está demostrado que la pepsina sólo puede actuar en un medío sumamente ácido que debe mantener durante varias horas hasta la completa digestión de las proteínas. Otro hecho igualmente comprobado es que, cuando matamos un pedazo de pan, papa o cualquier otro hidrato de carbono, las glándulas salivales segregan inmediatarriente ptialina y otros jugos alcalinos. Después de tragada la fécula alcalinizada necesita hallar en el estómago un medio alcalino para terminar de ser digerida por completo. Es fácil comprender lo que ocurre, cuando se ingiere simultáneamente hidratos, y proteínas.
El estómago, en respuesta a la presencia de proteína y féculas segrega al mismo tiempo jugos ácidos y alcalinos que se neutralizan entre sí y dejan una solución acuosa incapaz de digerir correctamente ni una cosa ni la otra Lo que sucede a continuación es que las proteínas se pudren y las féculas fermentan debido a la constante presencia de bacterias en el canal digestivo.
La putrefacción y la fermentación son las causas principales de todo tipo de problemas digestivos como gases, ardor, hinchazón, estreñimiento, heces fétidas, colitis, etc. Muchas de las llamadas "alergias" son también consecuencia directa de la mala combinación de los alimentos. La corriente sanguínea absorbe toxinas de la masa fermentada y putrefacta de los intestinos y estas toxinas a su vez provocan erupciones, urticarias dolores de cabeza y náuseas, y otros síntomas que se catalogan como alergias Los mismos alimentos capaces de producir una reacción alérgica cuando están mal combinados, muchas veces no producen ningún efecto cuando están bien combinados.
Clasificación de los alimentos según la medicina tradicional china
Según la NATURALEZA: Caliente, Tibio, Neutro, Fresco y Frío
Según el SABOR: Ácido, Amargo, Salado, Dulce y Picante
Según su COLOR: Rojo, Amarillo, Verde, Negro y Blanco
Según la DIRECCIÓN QUE INDUCEN
Según el MERIDIANO DE ACCIÓN
Según la constitución de la persona, la estación del año, la hora del día, etc.
Según la NATURALEZA del alimento
CALIENTES y TIBIOS (Yang): Calientan, tonifican el Qi y el Yang, secan, mueven, transforman, ascienden la energía y la expelen hacia el exterior, facilitan el metabolismo. Útiles en estados de fatiga, frío, dolores reumáticos tipo frío, estasis de sangre y energía.
El consumo excesivo de alimentos de energía caliente y comidas con especias (como curry, alcohol, café, cordero, ternera, especias…) da lugar a síntomas de Calor (especialmente de Estómago o del Hígado), como gusto amargo, sensación de ardor en el epigastrio, polidipsia, polifagia, etc.
FRESCOS y FRÍOS (Yin): Refrescan, enfrían, tonifican Yin (sangre, líquidos…), hidratan, lubrican, calman, sedan, ralentizan, nutren, llevan la energía hacia dentro, contraen, forman la estructura. Útiles en casos de fiebre, inflamación, calor, agitación, insomnio, ansiedad.
El consumo excesivo de lo que la MTC considera alimentos de energía Fría y alimentos crudos (como ensaladas, helados, bebidas frías o fruta) pueden también, debilitar la esfera funcional del Bazo (en concreto, Yang de Bazo) y producir síntomas como: diarreas, escalofríos, abdominalgia…
NEUTROS: Equilibran, estabilizan, armonizan
Por otro lado, el exceso de fritos, leche, queso, mantequilla, nata, plátano, cacahuetes o carnes grasas debilitan la función del Bazo (transformación y transporte) y puede causar síntomas de acumulación de Humedad y/o Tan: sinusitis, secreción nasal, sensación de tener la cabeza “atontada”, cefaleas sordas, bronquitis, etc.
Los cinco elementos y los cinco sabores
La teoría de los cinco elementos se basa en la idea de que todos los fenómenos del universo son el resultado del movimiento y mutación de las cinco categorías: madera, fuego, tierra, metal y agua, también conocidas como las cinco fases. Para gozar de buena salud, estos elementos deben estar en armonía. Los alimentos y las plantas se emplean para reequilibrar los elementos dentro del cuerpo.
La teoría de los cinco sabores puede considerarse una subcategoría dentro de los cinco elementos. Los cinco sabores son: picante, agrio, amargo, dulce y salado. El término “sabor” hace referencia a la naturaleza curativa de un alimento o planta y no necesariamente a su sabor tal y como se entiende en Occidente. Entre los alimentos picantes se encuentran el ajo, el jengibre y las cebolletas; los limones, las manzanas y los kiwis se consideran agrios; el café, el té y las almendras se consideran amargos; los dátiles, el arroz y el pollo son dulces, y el cerdo, los mejillones y la sal sin refinar son salados.
Cada sabor se asocia con una categoría: los alimentos agrios, amargos y salados son yin, mientras que los picantes y los dulces son yang; cada sabor se asocia con un movimiento específico del chi y se empareja con un órgano vital, de forma que los alimentos con un sabor determinado se emplean para tratar disfunciones sufridas por el órgano correspondiente (ej. Los alimentos dulces se asocian con el estómago, y por lo tanto pueden utilizarse para tratar problemas como la diarrea)
Según la NATURALEZA
Según constitución de la persona:
YANG: Tomar alimentos frescos o neutros, tibios (moderadamente) y evitar alimentos calientes y fríos.
YIN: Tomar alimentos tibios y neutros, algo de alimentos calientes, moderadamente alimentos frescos y evitar los fríos.
Según su SABOR
Cada sabor tiene una característica energética diferente según el efecto que producen en el organismo tras su digestión. En cantidad moderada, cada sabor, tonifica un órgano, en exceso lo daña. Una dieta equilibrada debe contener todos los sabores pero con preponderancia del sabor dulce.
ÁCIDO: Tonifica el elemento Madera (Hígado Vesícula Biliar), tiene naturaleza Yin (función nutritiva y de absorción): astringe, contrae la energía hacia adentro y actúa sobre el hígado y la vesícula biliar (elemento Madera). Los alimentos ácidos son útiles en la pérdida de líquidos orgánicos (vómitos, diarrea, sudor excesivo, hemorragias), promueven la secreción biliar, desintoxicantes y alcalinizantes, evitan el estancamiento de Qi, actúan directamente sobre los tendones y en exceso, pueden crear Humedad.
AMARGO: Tonifica el elemento Fuego (Corazón Intestino Delgado), tiene naturaleza Yin, favorece el drenaje y la eliminación hacia abajo: evacuación y diuresis; Seca, favorece la digestión, abre el apetito y actúa directamente sobre la Sangre. Por ese motivo, hay que vigilar el exceso de sabor amargo en casos de deficiencia de sangre y/o líquidos orgánicos.
SALADO: Tonifican el elemento Agua (Riñón Vejiga); Tiene naturaleza Yin (mueve la energía hacia dentro y hacia abajo), actúa directamente sobre los huesos. En cantidad moderada: humedece, lubrifica, ablanda, suaviza, desintoxica, pero en exceso: sobreestimula los riñones, y en consecuencia los daña; también debilita los huesos, la sangre y el corazón
DULCE: Tonifican el elemento Tierra (Bazo Estómago); Tiene naturaleza Yang (ayudan a ascender la energía). En cantidad moderada: armoniza, refuerza, tonifica, promueve la producción de líquidos orgánicos (lubrifica). En exceso favorece la producción de humedad y flema. Los alimentos dulces según la MTC, actúan directamente sobre la carne (músculos) y están en mayor o menor medida en muchos alimentos.
PICANTE: Tonifica el elemento Metal (Pulmón Intestino Grueso); Tiene naturaleza Yang (ayuda a ascender la energía hacia arriba y hacia fuera); En cantidad moderada promueve la circulación de la Sangre y energía evitando los estancamientos, y en exceso: sobreestimula los pulmones agotando el Qi y la Sangre. El sabor amargo actúa directamente sobre el “Qi” (energía vital).
Según su COLOR
El color es vibración, energía y por tanto cada alimento, según sea su color, afectará de diferente forma al organismo.
ROJO: Tiene afinidad por el Corazón, promueve la circulación de la sangre, tonifica, calienta, revitaliza y estimula la sexualidad.
AMARILLO: (Naranjas, marrones) Tienen afinidad por el Bazo Estómago, estabilizan, equilibran y templan.
VERDE: Tiene afinidad por el Hígado, tonifica la Sangre de Hígado, desintoxica, depura.
NEGRO (es el color más Yin y más profundo): Tiene afinidad por el Riñón y la Vejiga, nutren la energía más profunda del organismo (Jing) y la Sangre, astringe y refresca.
BLANCO: Refuerza el Pulmón Intestino Grueso. Purifica.
Según la DIRECCIÓN que inducen
ASCENDENTE: Los alimentos que inducen a ascender la energía son, en especial, los de sabor DULCE + PICANTE y de naturaleza CALENTE + TEMPLADA: Cebolla, puerros, hinojo, ajo, jengibre, pimienta, canela, clavo, nueces, tomillo, orégano, castañas…
Se usan en: prolapsos, diarreas, metrorragias, pesadez de piernas, cansancio, apatía...
DESCENDENTE: Son en especial, los de sabor AMARGO + SALADO y de naturaleza FRÍA + FRESCA: Diente de león, achicoria, té, cerveza de trigo, algas… Se usan como laxantes y diuréticos, en cefaleas, migrañas, hipertensión, náuseas, vómitos…
CONCENTRAN Y RECOGEN: Inducen a concentrar y recoger la energía hacia dentro (astringencia). Son en especial, los de sabor ÁCIDO + SALADO y de naturaleza FRESCA + NEUTRA: Frambuesa, naranja, mandarina, escaramujo, azukis, tomate, algas, sepia, calamar…
Se usan en caso de pérdida de líquidos orgánicos: sudor, diarrea, hemorragias, vómitos…, en personas convalecientes, en invierno. Evitarlos en caso de fiebre, resfriado, etc. porque ayudarán a que el factor patógeno penetre más adentro.
DISPERSAN: Inducen a dispersar la energía hacia fuera y son diaforéticas. Son en especial, los de sabor PICANTE. Los alimentos PICANTES CALIENTES TIBIOS se usan para eliminar Viento Frío: ajo, chilli, pimienta, jengibre, canela.
Los PICANTES FRÍOS se usan para eliminar Viento Calor: menta, rábano
Los chinos consideran que la mayoría de los alimentos son medicinales, y que si se sigue una dieta adecuada, se realiza un poco de ejercicio, se hacen ejercicios respiratorios y se cuida la higiene personal, se pueden remediar las dolencias leves.
Las cuatro energías
El concepto de las cuatro energías puede considerarse como una subcategoría del yin y el yang. Las cuatro energías son caliente, templado, frío y fresco, e indican el efecto básico que ejerce un determinado alimento sobre el cuerpo, no su temperatura.
Los alimentos calientes y templados, tales como los pimientos verdes y rojos, el jengibre seco, los puerros y la leche de coco se consideran yang y se emplean para tratar dolencias relacionadas con el frío causadas por un exceso de yin (por ejemplo, sentir frío, tener diarrea o sufrir reumatismo articular crónico). Los alimentos fríos y frescos, como las berenjenas, la soja germinada, la sandía y los tomates pertenecen a la categoría yin y se emplean para tratar dolencias relacionadas con el calor causadas por un exceso de yang (por ejemplo, la gripe, el estreñimiento y los eczemas). Algunos alimentos como el arroz y la pasta se consideran neutros porque en ellos no predominan ni el frío ni el calor. Estos últimos no ejercen ningún efecto sobre la constitución, y por tanto se consideran como alimentos de uso corriente.
El movimiento del chi
Chi es el término chino que se utiliza para designar la fuerza vital o energía que fluye constantemente por el cuerpo. Existen distintas clases de chi, siendo las principales: el chi congénito, presente en el cuerpo al nacer; el chi protector, que rodea el cuerpo; el chi nutritivo, presente en la comida. El equilibrio, la cantidad y la calidad del chi de un individuo dependen sobre todo de los alimentos y las bebidas que consume, y del aire que respira. Otros factores que pueden influir son los cambios de estación y climáticos, y el estado de los órganos del cuerpo que absorbe el chi.
Cómo seguir una dieta china
Una dieta tradicional china incluye una gran proporción de alimentos neutros, tales como el arroz y la mayoría de cereales, y, según la constitución del individuo, una ingesta debidamente equilibrada de alimentos yin y yang. Puesto que cada alimento compensa los excesos y las carencias del cuerpo de un modo específico y puesto que cada individuo tiene sus propias necesidades-, ciertos alimentos se consideran perjudiciales para un individuo mientras que para otro son beneficiosos. La salud y la sensación de bienestar de una persona puede mejorar considerablemente al comer o evitar determinados alimentos que afectan a su constitución.
El primer paso para adoptar una dieta china consiste en identificar la constitución del individuo. Una persona puede tener una constitución caliente (yang) o fría (yin). Las primeras deben consumir alimentos que contengan energía fría o fresca; por el contrario, las personas con constitución fría deben consumir básicamente alimentos que contengan energía caliente o templada. La dieta debe asimismo adaptarse a los cambios climáticos y de estación.
Alimentos recomendados
Excesivamente yang
Pescado blanco, pato, conejo, trigo, cuscús, cebada, mijo, judías verdes, guisantes, soja, tofu, ensaladas, espinacas, remolacha, calabacines, limones peras, manzanas, mandarinas, sandía y uva.
Excesivamente yin
Cebollas, ajo, jengibre, clavo, zanahorias, apio, hinojo, cordero, ternera, pollo, trigo sarraceno, mijo, castañas, frutos secos, cerezas, lichís e higos.
Poco yang
Ajo, cebollinos, clavo, canela, cilantro, berenjenas, zanahorias, apio y col cocidos, calabaza, espinacas, puerro, patatas, avena, cacahuetes, trigo, maíz, arroz, soja, mijo, leche caliente, ganso, pollo, miel, marisco, castañas, frutos secos, cerezas, uvas, lichís e higos.
Poco yin
Berenjenas, recmolacha, pepino, espinacas, ensaladas, champiñones, leche de vaca, huevos, pescados de río, cangrejos, gambas, codornices, pato, limones, higos, mandarinas, papayas, peras, manzanas, mangos, melones y pomelos.
Alimentos a Evitar
Excesivamente yang
Mantequilla, nata, todos los productos cárnicos, huevos duros, carnes curadas, quesos grasos, trigo sarraceno, pasta, pasteles, ajo, cebollas, jengibre, apio, pimienta negra, curry y frutos secos.
Excesivamente yin
Ensaladas crudas, pepino, tomate, berro berenjenas, algas ruibarbo, mantequilla, leche, queso, cerdo, conejo, pato, trigo, cebada, avena, cacahuetes, semillas y aceite de girasol, limones, naranjas, pomelo, sandía, melón, peras y mango.
Poco yang
Ensaladas, zanahoria y col crudas, pepinos, tomates, leche de vaca fría, clara de huevo, judías, guisantes, naranjas, piña, pomelos y sandía.
Poco yin
Clavo, canela, pimienta, zanahorias, puerro, trigo sarraceno, albaricoques, castañas, uvas, huevos fritos, pavo, faisán, cordero, frutos secos, café, vino, alcohol y vinagre.
Alimentos recomendados
Pescado blanco, pato, conejo, trigo, cuscús, cebada, mijo, judías verdes, guisantes, soja, tofu, ensaladas, espinacas, remolacha, calabacines, limones peras, manzanas, mandarinas, sandía y uva. Cebollas, ajo, jengibre, clavo, zanahorias, apio, hinojo, cordero, ternera, pollo, trigo sarraceno, mijo, castañas, frutos secos, cerezas, lichís e higos. Ajo, cebollinos, clavo, canela, cilantro, berenjenas, zanahorias, apio y col cocidos, calabaza, espinacas, puerro, patatas, avena, cacahuetes, trigo, maíz, arroz, soja, mijo, leche caliente, ganso, pollo, miel, marisco, castañas, frutos secos, cerezas, uvas, lichís e higos.
Berenjenas, remolacha, pepino, espinacas, ensaladas, champiñones, leche de vaca, huevos, pescados de río, cangrejos, gambas, codornices, pato, limones, higos, mandarinas, papayas, peras, manzanas, mangos, melones y pomelos.
Alimentos a evitar
Mantequilla, nata, todos los productos cárnicos, huevos duros, carnes curadas, quesos grasos, trigo sarraceno, pasta, pasteles, ajo, cebollas, jengibre, apio, pimienta negra, curry y frutos secos. Ensaladas crudas, pepino, tomate, berro berenjenas, algas ruibarbo, mantequilla, leche, queso, cerdo, conejo, pato, trigo, cebada, avena, cacahuetes, semillas y aceite de girasol, limones, naranjas, pomelo, sandía, melón, peras y mango. Ensaladas, zanahoria y col crudas, pepinos, tomates, leche de vaca fría, clara de huevo, judías, guisantes, naranjas, piña, pomelos y sandía. Clavo, canela, pimienta, zanahorias, puerro, trigo sarraceno, albaricoques, castañas, uvas, huevos fritos, pavo, faisán, cordero, frutos secos, café, vino, alcohol y vinagre.