La chocoterapia
¿Te imaginas disfrutar del chocolate sin temor a engordar? Pues gracias a la chocoterapia o masajes con chocolate, este delicioso manjar dejó de ser únicamente disfrute para nuestro paladar. La chocoterapia es un tratamiento beneficioso tanto física como mentalmente ya que nos permite hidratar y tonificar nuestra piel al mismo tiempo que nos ayuda a relajarnos y dejar de lado el estrés.
Para realizar estos masajes se utiliza una mezcla de cacao puro, manteca de cacao y aceite de almendras, que tiene sales minerales como magnesio, fósforo y calcio que hidratan y suavizan nuestra piel, además de tener una acción reductora de grasas por lo que se recomiendan para tratar la flacidez y la celulitis.
Otro gran beneficio de la chocoterapia es el comprobado efecto antioxidante de sus componentes que ayudan en tratamientos anti-envejecimiento revitalizando la piel de manera asombrosa.
A nivel psicológico se ha probado que el chocolate activa las endorfinas y estimula la serotonina lo que hace maravillas por nuestro estado de ánimo actuando como calmante natural.
El tratamiento de masajes con chocolate es un tratamiento integral, es decir, abarca tanto cuerpo como rostro. Dura alrededor de una hora en la que el primer paso es preparar el cuerpo con una exfoliación completa a base de masajes rotativos. A continuación, se aplica la mezcla de chocolate y aceite de almendras sobre espalda, brazos, piernas y rostro. Se masajea y se culmina con una ducha y la aplicación de una crema hidratante a base de cacao.
La Chocoterapia llama con fuerza a las puertas de la belleza, para regalarnos todas sus propiedades y beneficios a la hora de conseguir una piel más hermosa y alejarnos del mundanal ruido, gracias a una sensación incomparable de bienestar y relajación. Y todo ello, gracias a los tratamientos que contienen productos con chocolate. Tratamientos que envuelven la piel en esta materia y que consiguen transmitir todos los beneficios de la misma.
Cualidades del Chocolate
Una de las principales cualidades cosméticas del chocolate es su alto contenido en antioxidantes, como los polifenoles (catequinas, epicatequinas, y taninos), de la familia de los flavonoides, que también son capaces de reducir la inflamación de los vasos sanguíneos.
Por eso, el chocolate es ahora el condimento de los nuevos tratamientos anticelulíticos, porque al mejorar la microcirculación, es capaz de devolver la firmeza y ponerle fin a la piel de naranja.
El Chocolate también contiene antioxidantes, muy importantes a la hora de luchar contra el envejecimiento; y aminoácidos esenciales, que ejercen sobre la piel un efecto tensor inmediato y visible.
En definitiva, el Chocolate tiene efectos lipolíticos, antioxidantes, drenantes, vitalizantes, suavizantes e hidratantes.
El Chocolate marca tendencia
La Chocoterapia es una tendencia cada vez más extendida en los salones de belleza y con más adeptos entre el público. Casi nadie se resiste y, en general, todos necesitamos mimarnos un poco más.
En todo caso y, aparte de sus efectos psicológicos, está demostrado que el cacao contiene sustancias lipolíticas, anticelulíticas y adelgazantes que lo convierten en un eficaz tratamiento corporal.
La Chocoterapia triunfa, y sin dejar de lado otros cosméticos, es demandada no sólo por sus efectos estéticos, sino por la carga de sensualidad (entendida como disfrute de los sentidos) que conlleva.
¿Qué tiene el Cacao que nos vuelve locos?
En general, el consumo de cacao mejora el ánimo y esto es gracias a que contiene una sustancia denominada Teobramina, que induce la producción de beta endorfinas. Estas hormonas son las responsables directas de las sensaciones de tranquilidad, relajación y felicidad. Un capricho para los sentidos.
Pero además, el cacao contiene pequeñas cantidades de otras sustancias endorfínicas.
De ahí que al entrar en contacto con él la reacción inmediata sea placentera:
- Triptófano: Vinculado en la producción de serotonina (vinculada al éxtasis emocional)
- Phenylethylamine: Estimula los centros de placer
- Anandamine: Neurotransmisor que mantiene los efectos antes citados durante más tiempo.
Para que se produzcan estos efectos, por supuesto que tenemos que asegurarnos de que el producto en cuestión (el cosmético en este caso) no sólo parezca o huela a chocolate, sino que contenga Cacao puro en un elevado porcentaje.
Curiosidades con respecto al cacao
Éste proviene mayoritariamente de África ecuatorial, donde países como Costa de Marfil (el mayor productor del mundo) y Ghana dependen en gran medida de sus exportaciones a los principales países fabricantes de chocolate y derivados del cacao: EE.UU, Alemania, Reino Unido, Francia y Brasil.
Si buceamos un poco en la historia descubrimos que ya los aztecas atribuían al chocolate poderes místicos. Y es que el misticismo siempre ha rodeado a tan dulce golosina. De hecho, el significado exacto del nombre latino del cacao, theobroma, debido a la botanista Carolus Linnaeus, es comida para dioses .( Su descubrimiento para Occidente vino de la mano de Cristobal Colón y las primeras plantaciones en nuestro continente surgieron de Hernán Cortés. Pero aún nos podemos remontar mucho más allá.
La mítica Cleopatra no sólo se sumergía en leche de burra para afinar su piel. También se le atribuye la ingesta y uso de cacao para tal fin. Sí, has leído bien. Puedes alejar la idea de que el chocolate produce esos antiestéticos granos y espinillas en el rostro.
Hoy por hoy los más afamados nutricionistas lo niegan. Alimento de alto poder energético, muy pocos se resisten ante él. En lo referido a nutrición, el chocolate aporta hidratos de carbono, lípidos y proteínas, vitaminas A, B1, B2, D y E, y minerales como el calcio, fósforo, magnesio y trozos de hierro y de cobre. Su aroma, cuando se trata de chocolate caliente, es inconfundible.
Y parece estar asegurado también el hecho de que induce a la producción de betaendorfinas, lo cual relaja y serena el ánimo creando una sensación de placer extremo, lo mismo que ocurre al entrar en contacto con el paladar. Raro es el hombre o mujer, niño o niña, personas de cualquier género, condición y edad que se resista a la tentación del chocolate.
E igual ocurre con los tratamientos de belleza basados en el mismo: una vez se prueban, se repite. Podemos concluir que no se trata de una moda pasajera. La Chocoterapia lleva funcionando un tiempo y su actualidad y el despliegue de productos existentes ya en el mercado, hablan positivamente de la misma.( Date un gusto, un capricho como los dioses, y elige el chocolate más afin a tus propósitos y necesidades.