Propiedades del Aloe Vera
Caracteristicas del Aloe Vera que han sido estudiadas
- Nutritivo Inhibidor del dolor Antiinflamatorio
- Cicatrizante Bactericida Digestivo
- Depurativo Regenerador Celular Antibiótico
- Antiséptico Coagulante Antiviral
Forma de Empleo
Se han de cortar las hojas más bajas, exteriores y más próximas a la tierra, porque son las más viejas y tienen concentradas todas sus propiedades curativas. La herida cicatriza sin alterar el crecimiento de la planta. Se corta el trozo que se necesita, se sacarán los bordes espinosos; si es para uso interno, se separa la piel y se come la pulpa. Se ha de tener un rato en la boca y masticarla, hasta que esta quede líquida antes de tragarla. Si es para uso externo, se sacan los márgenes espinosos, se abre el trozo por la mitad, y se aplica fregando a modo de cataplasma. Se puede calentar la hoja, pasándola cerca de una fuente de calor antes de su uso.Si se tiene alguna dificultad para ingerir la pulpa, por su posible gusto amargo, a causa del sérver, ha de haberse lavado después de pelado. Es posible tener una sensación babosa en la boca, a causa de su estructura gelatinosa. Esta sensación, dura aproximadamente un par de minutos, es así como se absorbe toda su riqueza, pero si no se puede aguantar, entonces se pasa la pulpa por una batidora, mezclándose, con cualquier clase de zumo de fruta.
No es recomendable ingerir Aloe durante el periodo de embarazo, ya que este es astringente. Por lo tanto, se recomienda, excepto en casos de piel con exceso de grasa, alternar el uso de la planta con algún aceite o crema hidratante.
Se ha de remarcar, que la constancia es fundamental para obtener buenos resultados. En tratamiento largos por vía interna (osteoporosis, psoriasis, diabetes,...) es conveniente, después de cada mes de ingestión de pulpa, descansar una semana, para que el organismo asimile los efectos.
Se corta el trozo a emplear, se quitan los bordes espinosos, la piel se separa y se usa la pulpa, tanto por vía interna como externa. Vía Externa: es muy eficaz en los tratamientos de psoriasis, hongos, eccemas, acné, quemaduras,... Vía interna: para úlceras, diabetes, psoriasis, osteoporosis, fortalecedor del sistema inmunológico,... Esta planta, absorbe las energías negativas de los espacios que uno habita.
Aplicaciones Terapéuticas
Las hojas frescas o el zumo de Aloe vera resultan ideales para tratar quemaduras producidas por diferentes agentes (por calor, solares, radiaciones, químicas, eléctricas, congelación, etc.) por su acción astringente y antiséptica, así como ampollas, picaduras, cortes, llagas y otras heridas en la piel (evitando el contacto con los ojos).
A nivel externo también se puede emplear para desinfectar y cicatrizar heridas, aliviar las hemorroides, dermatitis, psoriaris, eczemas, acné, herpes labial, manchas en la piel y estrías postparto. Por sus propiedades antisépticas se recomienda en caso de pie de atleta y hongos en las uñas; así como en el tratamiento de úlceras crónicas en piernas debido a los mucopolisacáridos contenidos en el gel; problemas capilares como seborrea, caspa y piel grasa; y en caso de problemas dentales como inflamación gingival o halitosis.
Sus aplicaciones más significativas por vía interna son los problemas digestivos, úlceras pépticas, hernia de hiato y facilita la digestión por su alto contenido en enzimas; aunque su empleo más extendido y conocido en su uso para tratar el estreñimiento, su acción laxante se observa transcurridas aproximadamente 8 horas desde su ingestión. También es útil en problemas hepáticos, renales y pancreáticos, como dispepsias y disquinesias biliares. Activa el riego sanguíneo, la circulación linfática y las funciones renales ayudando a regenerar y depurar de la sangre.
El jugo de aloe vera también puede tomarse internamente en caso de dificultades respiratorias como tuberculosis, bronquitis, asma, resfriados, congestión nasal y anemia por su alto contenido en vitaminas y minerales. Incluso refuerza el sistema inmunitario por lo que resulta útil en aquellas enfermedades en las que éste se encuentre deprimido como el Sida.
Uso Cosmético
Entre las utilidades del aloe está la de producto cosmético, tanto base del producto como componente esencial del mismo, gracias a sus propiedades regenerativas.
Tratamiento de la piel
En aloe penetra en las tres capas de la piel: epidermis, la dermis y la hipodermis, expulsando las bacterias y los depósitos de
grasa que tapan los poros. Al mismo tiempo, la acción de los nutrientes naturales, los minerales, las vitaminas, los aminoácidos y las encimas, estimulan la reproducción de nuevas células.
También es un importante regenerador celular, cicatrizante, tonificador y de alta penetración en la piel. Cuando se usa con regularidad, evita las arrugas prematuras y retarda las propias de la edad. Reduce la medida de los poros abiertos, y se puede usar bajo el maquillaje.
Como el aloe es astringente, se ha de combinar su uso con una crema hidratante, preferiblemente que lleve aloe entre sus componentes.
Es un excelente filtro solar de rayos ultravioletas y elimina las manchas causadas por el sol, si se usa por un período largo de tiempo.
El aloe, utilizado después del afeitado, da buenos resultados, ya que en pocos instantes regenera muchas de las células rotas al paso de la cuchilla de afeitar. Así, usando una loción después del afeitado dará una sensación de gran alivio. Igualmente, en este sentido es muy eficaz utilizado después de la depilación: evita erupciones, granitos y rojeces, cerrando rápidamente los poros dilatados.
También es muy efectivo en la prevención o eliminación de pequeñas estrías.
La hidratación de la piel con aceite o crema después de que el aloe haya penetrado en la piel es muy importante.
El pelo y el cuero cabelludo
El jugo de aloe se puede utilizar como champú, fijador y acondicionador, con notables resultados tanto para el cabello, como para el cuero cabelludo. Incluso las enfermedades del cuero cabelludo como la grasa y la caspa, se pueden tratar directamente con jugo de aloe.
Higiene bucal
El tratamiento de la boca con aloe es muy bueno para remediar las encías sangrantes e hinchadas. Aligera el dolor de muelas y rebaja los flemones. También es preventivo de las caries y protege de los elementos agresivos que desgastan, a lo largo del tiempo, el esmalte de los dientes. También se pueden tratar enfermedades de la boca como el herpes labial o el afta.