Tarot Piamonte
Uno de los más bellos e importantes Tarots italianos del Siglo XIX. Constituye la readaptación italiana del modelo Marsella. Diseñada por Ferdinando Gumppenberg e impresa por Carlo della Rocca dio origen a lo que podría llamarse Tarot clásico italiano y tuvo varias reediciones a lo largo del siglo XIX. Constituye la readaptación italiana del modelo Marsella.
Diseñada por Ferdinando Gumppenberg fabricante de origen alemán, que desde 1810 había desarrollado una intensa actividad productiva basada en la invención de nuevos naipes. Gumppenberg encargó la ejecución de esta baraja de tarot al grabador Carlo Della Rocca; la primera baraja se imprimió hacia el año 1830 y su éxito fue tan grande que poco tiempo después empezó a ser copiada por otros fabricantes, entre ellos los milaneses Bordoni y Dotti, el genovés Armanino y también Masenghini de Bérgamo.
Este tarot fue acogido con agrado en el vecino Piamonte, de modo que los hermanos Avondo de Serravalle Sessia decidieron copiar las figuras para iniciar su producción hacia el año 1860. Este mazo no fue grabado a partir de planchas de madera como los anteriores sino metálicas, lo que permitía mayor detalle y precisión en el dibujo por lo que fue llamado "Suprafino", superfino en italiano.
Aunque muy influenciado por el Marsella se aparta en gran medida de él por derivar de barajas alemanas.
En la fabricación de cartas de Tarot se establecieron dos corrientes en la primera mitad del siglo XIX. Por un lado estaban los productores fieles al modelo Marsella que no introdujeron ninguna novedad especial, por aquello de que “Para qué lo voy a cambiar si así funciona”. La otra corriente no se puede decir que fuera altamente innovadora, pero si que se dieron algunos cambios en su afán por distinguirse.
Las modificaciones más sustanciales se aprecian en el idioma de las leyendas que aparecían en las cartas, que pasaron a imprimirse en italiano. También se dieron algunos cambios en la iconografía, como por ejemplo la aparición de una mariposa delante de la cara del Loco, dando la sensación de que éste sigue el trayecto que le marca el insecto.
Quizás la novedad más sorprendente la constituye, en torno al año 1.870, la aparición de barajas piamontesas en las que las figuras aparecían dobles. Esto es, tomar la mitad superior de la carta y duplicarla de tal manera que tanto derecha como invertida, la imagen es la misma. Este Tarot Italiano, es un clásico entre los tarot, esta bonita baraja, la que fue imprimida en el año 1830 y más tarde fue impresa en 1880, por Cartiera, en Serravalle Sesia, un pequeño pueblo de la provincia italiana de Vercelli, en el Piamonte.
En el siglo XVIII se instalaron en este pueblo otros fabricantes de naipes, atraídos por el bajo coste del papel, material para estas laminas. Las barajas de Tarot no podían faltar entre los productos que allí fabricaban ya que en aquella época era uno de los juegos de moda entre las mujeres.
Es un Tarot que está entre los mejores ejemplos de arte en el Tarot, enfoca raíces de la cultura y la historia Italiana, esto es algo que destaca en esta versión de della Rocca, es algo que nos transporta a siglos atrás, a aquellas minuciosas pinturas que se realizaban a mano, donde cada Arcano, es único, el que contiene un mensaje mágico, son cartas las que merece la pena recrearse al mirarlas.