Significados arcanos menores Tarot Osho Zen VII
A diferencia de otras religiones, que se han venido abajo debido a su culto a los héroes y al dogmatismo, el Zen insiste en la capacidad única de cada ser humano para alcanzar la iluminación, o la liberación de las ilusiones del ego creadas por la mente, e insiste en que esta capacidad solamente puede lograrse a través de la meditación y no por seguir determinados rituales o por seguir un conjunto de reglas, o al imitar el ejemplo de otros por muy significativos que sean, si no debido únicamente a un estado de atención alerta y sin enjuiciamientos, de los pensamientos, acciones y sentimientos propios.
Cuando practicamos este estado de atención, este enfoque meditativo frente a la vida, pronto nos trae éste mismo la consciencia de que cada uno tenemos un centro de contemplación eterno, imperturbable y que no cambia, un centro que tiene la capacidad de ver la vida como una gran aventura, como un juego, como una escuela de misterio y, finalmente, como una jornada dichosa con el único propósito de deleitarse con cada paso a lo largo del camino.
58. Ir con la Corriente: Esta carta también recibe el nombre de Fluir.Podemos ver a una figura que se desplaza tranquilamente por el agua. No va contra la corriente sino que permite que la marea la mueva sin oponer la persona resistencias. El agua sabe cómo manejarse; no temas zambullirte en ella pues ya sabemos que las emociones son agua que debe ser liberada y nunca estancada.
Se trata del agua en su naturaleza esencial, por tanto, ni sobreactuará ni se estancará si tú permites que fluya libremente. Los excesos no son la verdadera naturaleza de las emociones, sino que surgen por intentar controlarlos sin confiar en los verdaderos sentimientos. El camino del Tao es el camino del arroyo, se mueve como el agua, ¿Cuál es el movimiento del agua? ¿O el de un río?
El movimiento tiene unas cuantas cosas hermosas. Uno, siempre se desplaza hacia lo profundo, siempre busca el nivel inferior. No es ambicioso, nunca aspira a ser el primero, quiere ser el último. Recuerda, Jesús dice: "Aquellos que son los últimos aquí serán los primeros en mi Reino de Dios".
El está hablando del camino acuoso del Tao; no lo menciona pero habla de él. Sé el último, no seas ambicioso. La ambición implica ir cuesta arriba, el agua va hacia abajo, busca el terreno más bajo, quiere ser una "no entidad", no quiere declararse único, excepcional, extraordinario. No tiene idea del ego.
59. Esquizofrenia: Esta carta de La Esquizofrenia en Tarot de Osho Zen, nos habla de fuertes divisiones, las que están presente en nuestra vida, nos dice que es importante ir por el camino del Zen, para conseguir la energía necesaria que ayude a enfrentar esta situación, nos indica la existencia de alguna persona cercana que se puede encuentra con esta enfermedad, y nos dice que le ayudemos en lo posible a salir de ese infierno, compartiendo y recordando cosas bellas de la vida.
Esta carta de La Esquizofrenia nos quiere hacer ver la diferencia del mundo primitivo a estos días, nos quiere mostrar que a nosotros nos parece un abismo, pero que para el tiempo es algo que está parado, ya que el tiempo pasa en nosotros, no en el tiempo, el que siempre está ahí, nunca falla, nunca cambia, somos nosotros y las cosas las que cambiamos, y por esta razón a uno o a otro nos puede venir un cambio en cualquier momento, ya que el hombre es, sólo una consecuencia del mismo hombre, por lo que ir por el camino del Zen, nos ayuda a reflexionar y saber estar en esta realidad de Esquizofrenia, buscar en el conocimiento y eliminar la personalidad dividida, es una forma de lograr purificarse y limpiar todo nuestro ser, encontrándonos a sí mismo.
60. Aislamiento: El Aislamiento se relaciona muy fuertemente con las ramas del Ego. Cuando hablamos del Ego en el camino del Zen hablamos de estar sólo como en una isla, alejado de todos los demás y teniendo un propio límite en donde nadie puede vulnerarlo. El significado del Ego se ampara entre el límite de el yo y el no yo y es aquí donde el nombrado como mal Ego puede aislar y congelar.
Es cuando el individuo se estanca, es cuando no fluye más. Si uno se mueve y no se estanca uno no puede vivir con Ego, y es esta principal realidad fría de temores y disgustos que llevó al hombre a tener tantas divisiones como individuos, cada cual se queda en su Ego y no se dispone a desprenderse de él. Por el contrario el Zen te recuerda la existencia del amor, el amor es cálido, el amor no trae miedos, con la aparición de este amor los límites desaparecen porque aparece el placer, y este placer no es superficial, este placer logra evadir la frialdad para conquistar todo corazón y toda razón.
Si observamos la carta del Tarot de Osho podemos ver a un rostro que se ha congelado como el hielo, que ha perdido su color, y que lo único que brilla son las lágrimas de su dolor. Es una carta que llama a la reflexión, es una carta que si sale en tu Tirada de tarot te invita a que salgas de ese estancamiento en el que te encuentras. Es momento de enfrentar los temores y de mirar hacia delante, de sentirte fuerte y alegre, de poder compartir la energía más cálida y poderosa de nuestro mundo, la energía del amor.
61. Posponer: Esta carta nos dice que solo tenemos que quererlo, estar dispuestos y desearlo, pues ese día ya ha llegado ya no hay excusas ni argumentos que nos haga Posponer lo que tenemos que hacer. Si observamos esta carta Budista, vemos la imagen de una mujer que ha perdido su color, se refleja sin vitalidad, parece que todo en su vida ha quedado enmarcado como en un cuadro, y esto no es bueno, por lo que nos dice que vivamos los deseos, que sintamos satisfacciones, que nos hagamos con realidades que nos llenen el corazón.
Nos dice que meditemos sobre esta situación, que avancemos, pero que lo hagamos sin falsas excusas y sin engaños, nos dice que es importante vivir el presente, el hoy, que vayamos hacia algún sitio, que no tiene sentido que uno posponga las cosa sin un motivo autentico, ya que si uno se acostumbra a posponer uno se acostumbra y si es así, la realidad en un mañana nos encontraremos sin otra vida para cambiar las situaciones del momento, del ahora, ya no habrá marcha atrás y ya se decidas lo que se decida ya no será preciso hacer ese viaje, esa compra, ese proyecto, esa salida.
Esta carta nos recuerda la importancia de sentirnos vivos, tan necesario para el crecimiento personal, es una carta que marca la realidad de el tiempo y las elecciones que hagamos en el, nos dice que no dejemos para mañana lo que podemos hacer hoy y así poder sentir la satisfacción de haber lo hecho.
62. Comparación: Esta carta del Tarot Osho Zen muestra un aspecto muy primitivo presente en la humanidad, y es el estar comparando cosas incomparables. Si miramos la imagen vemos como está representada la ironía de tener cosas completamente diferentes en la balanza, dejando un claro mensaje de que la comparación dentro de los rasgos superficiales en el hombre es algo completamente vacío e ignorante.
Además, la carta de Comparación, nos habla del equilibrio, al no comparar no hay distinción, y al no haber esta distinción encontramos el equilibrio perfecto. No se compara una estrella con el agua, cada una de las dos tiene su lugar específico y necesario. La estrella necesita del agua tal como el agua necesita a la estrella para encontrar el equilibrio tal que la misma estrella termina siendo reflejada en el agua.
De la misma manera sucede con las diferentes personas, para que exista el rico debe de existir el pobre, para que exista el inteligente tiene que existir el ignorante, si alguno de los dos faltara el otro perdería su esencia e importancia. Esta carta te recuerda que no eres ni más ni menos que nadie, te lleva a la principal reflexión de que ya no puedes andar comparando a las personas. Acepta que eres realmente importante y juega con tus reglas, pues en tu camino de crecimiento solo hay lugar para ti, todos nacemos solos al igual que en el momento que morimos, esta vida está para crecer y compartir, no para comparar, acuérdate de quien eres y sigue por el sendero de la paz.
63. Peso Carga Lastre: Cuando arrastramos un peso respecto a lo que "se debería o no se debería hacer", impuesto por otros, nos volvemos como esta figura andrajosa y esforzada que está tratando de subir montaña arriba. Si en estos días la vida parece que no fuese más que una lucha desde la cuna hasta la tumba, puede que sea el tiempo de sacudir tus hombros y ver que tal te sientes, caminando sin estos personajes sobre tu espalda.
Tú tienes tus propias montañas para conquistar, tus propios sueños que cumplir, pero nunca tendrás la energía para conseguirlo a menos que te liberes de todas las expectativas que te han llegado de otros y que piensas ahora que son tuyas. Probablemente ellas existen sólo en tu propia mente, pero ello no quiere decir que no puedan agobiarte. Es el momento de aligerar y enviarlas de paseo. La verdadera vida del hombre consiste en la forma en que él aleja todas las mentiras impuestas por otros sobre él. Despojado, desnudo, natural, él es lo que es.
Es un asunto de ser, no de llegar a ser. La mentira no puede convertirse en verdad, la personalidad no puede convertirse en tu alma. No hay forma de hacer que lo no esencial se convierta en lo esencial. Lo no esencial sigue siendo no esencial y lo esencial continúa siendo esencial: no son intercambiables. Y esforzarse por alcanzar la verdad no hace más que crear mayor confusión.
La verdad no se tiene que alcanzar. No puede ser alcanzada, ya está ahí. Solamente se tiene que abandonar la mentira. Todos los propósitos, fines, ideales y metas, ideologías, religiones y sistemas para mejorar y perfeccionarse, son mentiras. Cuídate de ellas. Reconoce el hecho de que, tal como eres, eres una mentira. Estás manipulado y cultivado por otros.
Esforzarse por conseguir la verdad es una distracción y un aplazamiento. Es la forma en que se oculta la mentira. Mira la mentira, observa profundamente la mentira de tu personalidad, porque ver la mentira es dejar de mentir. Y dejar de mentir quiere decir no buscar más ninguna verdad; no es necesario. En el momento en que desaparece la mentira, queda la verdad con toda su belleza y brillo. Al contemplar la mentira, ésta desaparece y lo que queda es la verdad.