Marie Anne Adelaide LeNormand
Marie Anne Adelaide Lenormand (Alençon, 27 el 1772 de mayoParís, 25 el 1843 de junio), activa por más de 40 años y de fama considerable durante la era napoleónica. Ella dio consejo cartomántico a muchas personas famosas entre ellos los líderes de la revolución francesa (Marat, Robespierre y St-sólo), Emperatriz Josephine, y Zar Alejandro. En 1814 ella empezó una segunda carrera literaria y publicó muchos textos, causando muchas controversias públicas. Ella fue encarcelada más de una vez, aunque nunca mucho tiempo. En Francia ella es considerada la mayor cartomante de todos los tiempos, muy influyente en la ola de cartomancia francesa que empezó en finales del 18 siglo.
Ya en su infancia, aprendió a cómo manejar el Tarot. Como la baraja no satisfacía al 100% las necesidades de su trabajo, desarrolló su propia, basada en la baraja del Tarot.
Su imagen y actitud no correspondían a la de la clásica “hechicera”, sino más bien lo contrario. Se dice que tenía un porte muy distinguido y refinadas maneras, además de amplia cultura y extremada educación. Iba a todas partes acompañada de su gato, y su franqueza y transparencia le abrieron las puertas de todo París, ya que solía hacer las “predicciones” con bastante claridad y evitando ser críptica, parcial o vaga en sus análisis.
A parte de su actividad pública, se supone que secretamente tenía relación con los reservados círculos esotéricos de su época. Después de su muerte su nombre se usó en el tarot de Lenormand.
Lenormand se consagró tanto a su arte que ella creo un set de 36 cartas de su propio diseño. Cada carta lleva más de un significado. el significado de cada tarjeta en una lectura específica se relaciona directamente con su proximidad a la carta que representa a la persona consultante. Sin embargo, puede usarse con cualquier otra tirada del tarot.
“Diseñé una baraja propia, cuya primera versión se dio a conocer hacia 1828. Esta baraja- oráculo contenía inicialmente 52 cartas. Cada una de las cartas del Grand Lenormand está dividida en siete partes: el equivalente a la carta de juego de la baraja francesa; una constelación (zodiacal o no); una letra del alfabeto; una escena central mitológica, hermética o arquetípica; unas flores-hierbas; y otros dibujos menores relativos al significado particular de la carta. En 1840 rediseñé y reduje esta baraja a 36 cartas.” Mademoiselle Marie Lenormand.
La primera versión de estas cartas fue publicada a mediados del siglo XIX. Su nombre hace referencia a la famosa cartomante Madame Lenormand. El uso de las cartas Lenormand se ha extendido por todo el mundo, en España no son muy conocidas todavía, pero en el continente Americano están despertando furor. Existen otros países en los que existe una gran tradición de las Cartas Lenormand, estos países son Francia, Bélgica y Alemania. También los influjos de la famosa Madame Lenormand y de sus cartas llegaron a Italia hace ya mucho tiempo.
El mazo se compone de 36 cartas. En cada carta, como podemos observar más abajo, aparece un número al cual llamamos casa. Una imagen principal en el centro de la carta. Esta imagen es el símbolo que interpretamos en las lecturas de cartas. Por último suele aparecer una imagen en miniatura de una de las cartas de la Baraja Francesa o Baraja de Poker.
Al tratarse de sólo 36 cartas y de símbolos sencillos tales como: un libro, un árbol, una casa, unas flores, etc. Resulta muy fácil memorizar el significado de cada carta. Siendo la combinación de las cartas entre si la que nos revelará detalles asombrosamente concretos y exactos.
Diferentes versiones
Algunas versiones incluyen unos versos que no se sabe muy bien de donde salen. Los versos no se utilizan para interpretarlas. Un ejemplo son las cartas Lenormand de la editorial Carta Mundi.
Las cartas de Lenormand continúan seduciendo hoy en día a muchos videntes por el valor informativo que transmite, por su estructura y por la posibilidad de destapar todas las situaciones que se presentan en nuestra vida.