Los sueños en la historia
Hablar de los sueños es hablar de algo cotidiano, algo que forma parte de nuestras actividades diarias y por fuerza tiene que resultarnos familiar, porque todos soñamos, de eso no hay duda. Cada noche entramos varias veces en nuestro mundo particular el de los sueños.
Soñar es la forma más sutil que tenemos de comunicarnos con nosotros mismos.
Por eso, si atendemos a nuestros sueños, si les escuchamos y decidimos trabajar con ellos, tendremos a nuestro alcance unas de las formas de autoayuda más eficaces y cómodas que se conocen.
Cuando estamos dormidos y soñamos sucede algo mágico considerando siempre la magia como el arte de la transformación.
Es el propio inconsciente quien se vierte en nosotros quienes quiere comunicarse y facilitarnos de entre todo su saber lo que en ese momento determinado puede ayudarnos.
La historia de la interpretación de los sueños data del año 3000-4000 A.C. Estas interpretaciones y el significado de sueños dado se documentaron en tabletas de arcilla. Se dice que las personas de sociedades primitivas eran incapaces de distinguir entre la realidad y el mundo de los sueños. No solamente veían el mundo de los sueños como una extensión de la realidad, sino que también para ellos, el reino de los sueños era un mundo más poderoso.
Al soñar se borra la barrera entre el consciente y el inconsciente, por eso toda la información que nos llegue a través de los sueños será siempre muy valiosa y nos resultara útil para mejorar nuestra salud, para conocernos mejor y potenciar nuestro desarrollo personal, tanto en el aspecto humano como en el creativo o espiritual. Lo será incluso para saber que posibilidades nos ofrecen nuestro futuro inmediato.
- Inconsciente: conjunto de actos psíquicos que escapan a la consciencia.
- Subconsciente: estado psíquico del que el sujeto no tiene consciencia, pero que influye en su comportamiento.
Los antiguos egipcios consideraban que los sueños contenían mensajes de los dioses.
En Caldea y Babilonia la interpretación de los sueños llega a tener un gran auge.
Es bien sabido que todos los santos místicos y artistas de la historia han utilizado sus sueños para la inspiración espiritual y creativa, pero también los eruditos y científicos lo hicieron.
En la biblioteca de asurpanipal existían numerosos libros de interpretación teniendo incluso el propio rey su libro personal de sueños.
En la esfinge de Gizeh: entre sus patas, está esculpido el sueño de tuthmosis iv.
Platón en su libro la república afirmaba que a través de los sueños se manifestaba la verdadera y a veces oculta naturaleza del hombre.
El profeta mahoma comenzaba el día preguntando a sus discípulos que habían soñado.
Descartes: filosofo y matemático, sus propios sueños le revelaron ideas fundamentales sobre la cual basó su trabajo en metodología, álgebra, física y metafísica.
Voltaire: dijo en una ocasión: es indiscutible que en el sueño se presentan ideas constructivas
Gandhi: en 1919 un sueño encontró la solución para luchar contra el decreto rowlett de inglaterra
Wagner: dijo en una ocasión de la opera de tristán e isolda: "yo soñé todo eso, mi pobre cabeza nunca pudo haber inventado semejante cosa intencionadamente.
Paul webster: autor del tema de amor del doctor zhivago, dijo a su hijo que sus sueños fueron siempre una constante fuente de inspiración.
William styron: se despertó de un sueño con la idea de su libro: "la decisión de sophie".
El profeta hebreo daniel, escribió un libro sobre sus sueños en el año 165 a.c.
Hipocrates, medico del 460ªc. Ya incluía los sueños en sus curaciones.
Kant: en 1755 escribió: "los sueños de un visionario explicados por los sueños de la metafísica"
Hubo que esperar al siglo xix para asistir al nacimiento de tres hombres que revolucionaron por completo la historia de los sueños. Ellos fueron sigmund freud. Alfred alder y carl gustav jung.
Freud: creía que los sueños expresaban los deseos sexuales reprimidos.
Jung: desarrollo la teoría del inconsciente colectivo a partir de sus propios sueños. Decía que el sueño es un instrumento para conocer la verdad.
Alder: veía en los sueños los impulsos agresivos del individuo y los intentos de abordarlos de un modo socialmente aceptable. Creo la psicología individual.
La mitologia Grecolatina.
La mitología nos habla de tres deidades relacionadas con los sueños: Morfeo, Fantasio y Fobetor. Los tres eran hermanos e hijos de Hipnos y de la noche. Hipnos simbolizaba todos los sueños y era de talante bondadoso y amigable con los hombres a pesar de ser hermano gemelo de Thanatos “la muerte”.
De sus tres hijos, Morfeo se ocupaba de hacer resplandecer la verdad en los sueños e incluso anunciaba la presencia de personas que más adelante aparecerían en la vida real. Fantasio enviaba sueños falaces y fantasiosos, que a veces sin embargo evidenciaban los defectos y conductas erróneas de soñador. Y Fobetor, era capaz de enviar autenticas pesadillas que incluso podían llegar a obsesionarnos.
Las fases del sueño.
En ciclo normal de sueño se produce de tres a cinco periodos durante los cuales los ojos del durmiente se mueven con gran rapidez. Es justamente en estos periodos denominados fase REM (Rapid Eye Movement) cuando se producen los sueños mas vividos y espectaculares.
Cada noche se repite varias veces un proceso cíclico del sueño que va de más ligero a más denso y suele durar aproximadamente 90 minutos. Durante este tiempo el sueño pasa por cuatro fases diferenciadas.
La cuarta fase es el nivel mas profundo del sueño y cuanto más cansados estemos físicamente por el ajetreo diurno, mas tiempo pasaremos en este estadio que se caracteriza por la aparición de la actividad de las ondas cerebrales en el electroencefalograma. De la cuarta fase se vuelve a la primera pasando nuevamente por las fases intermedias y al llegar otra vez al estadio uno, es cuando se produce el periodo REM.
Si en este momento se despierta a la persona que duerme, es fácil que recuerde con detalle lo que esta soñando.
En la segunda fase suelen registrarse sueños tranquilos en los que a veces se desarrolla cierta actividad creativa e intelectual con encuentros y conversaciones. En esta fase es cuando se manifiestan los efectos del sonambulismo en aquellas personas que lo padecen.
La tercera fase del sueño es el comienzo del sueño profundo. En este estadio del sueño cuesta mucho despertarse y rara vez se tiene conciencia de haber estado soñando.
Los ensueños más claros y los que pueden recordarse con mayor facilidad son los que se producen hacia el amanecer en él ultimo periodo de sueño REM.