Para los malos pensamientos
Aunque los ángeles son seres espirituales, su poder se extiende sobre el reino material y es posible invocarlos para pedirles prosperidad, trabajo y mayor ingreso de dinero.
Si usted está atravesando una situación difícil a nivel monetario, no dude en recurrir a los ángeles, porque ellos pueden darle lo que usted necesita.
Para atraer la prosperidad material, será conveniente que usted entregue al ángel diferentes objetos de atracción material. El tomará de dichos objetos su energía y se la devolverá convertida en mayores ingresos.
En este apartado, por lo tanto aprenderá a confeccionar diferentes objetos de atracción de prosperidad material que usted deberá colocar en su templo antes de comenzar el ritual angélico. Una vez que el ángel se haya presentado y haya absorbido de ellos la energía que se encargará de transformar, estos objetos quedarán vacíos de poder.
La bolsa de la prosperidad
La bolsa de la prosperidad debe confeccionarse entre la Luna Nueva y la Luna Llena y debe ser de tela amarilla. Cósala a mano con hilo blanco y coloque en su interior:
- Una moneda del valor más alto de las que utiliza habitualmente.
- Una moneda del valor más bajo de las que utiliza habitualmente con una perforación en el centro que deberá realizar o pedirle a otra persona que realice con un taladro.
- Un billete de alto valor.
- Un objeto de oro. Puede ser una pequeña medalla, un anillo o lo que tenga más a mano.
- Un pequeño trozo de estaño.
- Un mechón de sus cabellos.
- Una piedra de lapislázuli.
- Granos de trigo.
- Granos de arroz.
Una vez que haya colocado todos los elementos, cierre bien el saco y colóquelo debajo de la almohada durante tres días antes de comenzar el ritual angélico.
El cuenco de la prosperidad
El cuenco debe comenzarse el primer día de Luna Creciente. Coloque en un recipiente pequeño siete lentejas, siete guisantes secos, siete granos de arroz, siete granos de trigo y siete gotas de aceite. Ponga el recipiente al sol durante un día entero y, por la noche, déjelo a la luz de la Luna.
Entonces colóquelo en el centro del templo angélico.
Amuleto con lentejas
La confección del amuleto debe comenzarse un domingo durante el periodo de Luna Nueva. Proceda de la siguiente manera:
- Seleccione siete lentejas grandes.
- Apague las luces de la habitación y encienda una vela de color amarillo.
- Cruce los pies (tenga en cuenta que jamás deberá cruzarlos dentro del templo angélico) y tome las lentejas entre sus manos con fuerza y piense que la situación que desea ya se ha materializado.
- Diga en voz alta:Quiero que mis ingresos aumenten con la misma potencia con que germinarán estas semillas.
- Apague la vela sin soplar (con los dedos húmedos).
- Realice este ritual durante siete días. Al octavo, deposite las lentejas sobre un algodón húmedo y déjelas germinar. Cuando asomen sus primeras raíces, colóquelas en el templo angélico sin sacarlas del algodón.
Usted puede elegir cualquiera de estos tres amuletos para entregárselos al ángel y que él se los devuelva transformados en prosperidad material. Después de confeccionar sus objetos de atracción, cumpla con cada uno de los pasos del ritual angélico.
Preparación del ambiente
Utilice aromas densos, por ejemplo, madera de sándalo y perfumes orientales. En cuanto a la música, prefiera las melodías cargadas de fuerza y energía como la Marcha Triunfal, de Aída o cualquiera de las sinfonías de Ludwig van Beethoven.
Preparación del templo y las ofrendas, consagración de talismanes.
Consulte en la tabla de ofrendas y talismanes y establezca cuáles son los que más le convienen de acuerdo con la especie angélica que va a invocar. Si invoca a más de un ángel y ambos pertenecen a un género diferente, atraiga a cada uno con la ofrenda que le corresponda y elija los talismanes que corresponden a cada uno.
Recuerde que el templo de invocación sólo estará completo cuando el círculo mágico se encuentre cubierto por el palio blanco.
Visualización
Un hombre desconocido, cuyo rostro está a medias oculto por un sombrero de ala ancha, avanza con las manos llenas de dinero. Al llegar frente a mí me dice: Mi nombre es Suerte, Prosperidad, Oportunidad o como quieras llamarme, y podrás disfrutar cuanto quieras de este regalo que voy a entregarte.
Adminístralo con prudencia y te proporcionará muchos momentos de placer y muchas satisfacciones". Yo tomo el dinero entre mis manos y le prometo gastar ese dinero com mesura y buen criterio. El hombre esboza una sonrisa y da media vuelta, retirándose de mi vista.
Afirmación
Creo en el poder de los ángeles para poner la suerte a mi favor, para mover los hilos del azar y la abundancia y darme así la oportunidad de incrementar mis ingresos para poder disfrutar junto con los míos de una situación material más próspera.
Invocaciones
Invocación del ángel guardián:
Yo, (su nombre), te invoco a Ti, (nombre del ángel guardián), para que me asistas y me protejas en mi intento de alcanzar la prosperidad. Desciende sobre mi templo y derrama tu luz bienhechora.
Invocación del ángel encargado de incrementar el dinero:
Yo, (su nombre), te invoco a Ti, Mumiah. Manifiéstate para que yo pueda sentir tu presencia bienhechora que otorga prosperidad. Hoy te necesito a Ti, tengo necesidad de que ejerzas tu poder sobre mí y espero confiado en que te harás presente en el templo y tu bondad modificará positivamente mi vida.
Ruego o mandato
Mumiah, necesito que incrementes mi patrimonio material. El dinero me ayudará a disfrutar de los bienes espirituales que ya poseo. Dame lo que te pido. Mumiah, y te estaré eternamente agradecido.
Sellado del mandato
Sello este mandato con las palabras angélicas ATRAI-TITRES. Que así sea.
Recepción del mensaje angélico
Permanezca en el templo y siga todos sus impulsos. Por ejemplo, si está tentado a abrir un libro, hágalo, es posible que allí encuentre la respuesta del ángel. Pero quizás el ángel postergue su presentación y elija aparecer en sueños. En cualquier caso, el medio de aparición del ángel le será revelado a través de sus sentimientos. Usted "sentirá" las manifestaciones del ángel. Si recibe un mensaje claro, consígnelo de inmediato en el diario angélico.
Agradecimiento
Yo, (su nombre), te agradezco a Ti, (nombre de su ángel protector), y Ti, Mumiah, por vuestra infinita bondad y por escuchar mi ruego. Allí donde vaya, los llevaré en mi corazón.
Por último, tome uno de los talismanes consagrados, protéjalo con una bolsita de terciopelo blanco, colóquelo en su billetera y llévelo siempre con usted.
Este ritual debe llevarse a cabo el primer día de Luna Llena. Coloque dentro del templo siete filas horizontales de siete velas cada una, de la siguiente manera:
- Primera fila: Velas moradas
- Segunda fila: Velas verdes
- Tercera fila: Velas amarillas
- Cuarta fila: Velas rojas
- Quinta fila: Velas plateadas
- Sexta fila: Velas doradas
- Séptima fila: Velas azules
Apague las luces de la habitación y encienda la primera fila. Pase las manos extendidas a pocos centímetros de las llamas y repita en voz alta:
Mis manos toman calor Mi vida va a mejorar Volveré a encontrar trabajo. Porque los ángeles me ayudarán
A continuación encienda las filas siguientes en el orden indicado y repita cada vez la oración en voz alta. Deje que las velas se consuman solas. Repita este ritual durante siete días, al atardecer, y en el día octavo, invoque a los ángeles.
Preparación del ambiente
Proceda de la misma manera que para pedir el incremento de sus bienes materiales.
Preparación del templo y las ofrendas, consagración de talismanes.
Consulte en la tabla de ofrendas y talismanes y establezca cuáles son los que más le convienen de acuerdo con la especie angélica que va a invocar. Si invoca a más de un ángel y ambos pertenecen a un género diferente, atraiga a cada uno con la ofrenda que le corresponda y elija los talismanes que corresponden a cada uno.
Recuerde que el templo de invocación sólo estará completo cuando el círculo mágico se encuentre cubierto por el palio blanco.
Visualización
Subo una escalera muy empinada. El final de la escalera está muy lejos del principio. Asciendo cada vez más despacio porque me fatigo y la fatiga me hace sentir desanimado. Pero a los costados de la escalera hay gente sin rostro que me incita a seguir subiendo. Venzo la fatiga y lo hago, pero otra vez me asalta el cansancio y nuevamente la gente sin rostro me anima a seguir. Por fin, veo el final de la escalera y entonces mi cansancio desaparece de inmediato. Cuando subo el último peldaño un hombre me entrega un papel y me dice: "Tu pacecimiento ha terminado, aquí tendrás ocupación y podrás ganarte el pan que comas".
Afirmación
Recurro al poder de los ángeles porque creo en su infinito poder para darme lo que necesito. Los ángeles me permitirán encontrar lo que he perdido y esta certeza es la llama que entibia mi corazón entristecido.
Invocaciones
Invocación del ángel protector
Yo, (su nombre), te invoco a Ti (nombre del ángel guardián), para que me protejas y me guíes convirtiendo mi desesperanza en luz.
Invocación del ángel o los ángeles del trabajo
Yo, (su nombre), te invoco a Ti, Lelahel, para que junto con tus hermanos Achaiah y Cahethel, me restituyas lo que he perdido. En mi corazón anida la desesperanza y de Ti depende que ese sentimiento desaparezca. Necesito vuestra luz y sé que no me la negaréis.
Ruego o mandato
A Ti te pido, Lelahel, que me restituyas el trabajo que he perdido. Necesito volver a encontrar la tranquilidad y la esperanza que otorga el trabajo y también los míos lo necesitan.
Sellado del mandato
Sello este mandato con las palabras TRUSANI-TERPLON. Que así sea.
Recepción del mensaje angélico
Permanezca en el templo y siga todos sus impulsos. Por ejemplo, si está tentado a abrir un libro, hágalo, es posible que allí encuentre la respuesta del ángel. Pero quizás el ángel postergue su presentación y elija aparecer en sueños. En cualquier caso, el medio de aparición del ángel le será revelado a través de sus sentimientos. Usted "sentirá" las manifestaciones del ángel. Si recibe un mensaje claro, consígnelo de inmediato en el diario angélico.
Agradecimiento
Yo, (su nombre), te invoco a Ti, (nombre de su ángel protector), y a vosotros Lelahel, Achaiah y Cahetel, por derramar vuestra luz sobre mí y escuchar mi pedido. Tome uno de los talismanes consagrados, protéjalo con una bolsita de terciopelo blanco, guárdelo en su billetera y llévelo siempre con usted