Ritual para "congelar"
La 'magia fría' se sirve del hielo, la nieve o el agua congelada para neutralizar las influencias negativas, los enemigos ocultos y alejar los malos pensamientos.Congelar el mal, esa es la finalidad de la magia con hielo o 'magia fría'. El poder de éstas técnicas varía según la intención del que las realiza, en ocasiones resulta tan drástica, que debe de utilizarse solamente ante circunstancias que así lo justifiquen.
El hielo o la nieve purifican y sirven de barrera a la llegada de males y pueden destruir o paralizar la vitalidad de una determinada situación o relación.
Si usted mantiene una relación que lo hace infeliz en lugar de procurarle satisfacción, no lo dude: es hora de terminarla ya. Aquí, varios rituales mágicos y algunos consejos útiles que lo ayudarán a conseguir este objetivo.
Hay relaciones humanas que son peligrosas, pero no siempre es fácil reconocerlas a tiempo. Las personas podemos enredarnos en vínculos, en los que, poco a poco, van surgiendo sensaciones contradictorias, sentimientos confusos que despiertan aspectos oscuros de nuestro ser. Estas relaciones nos hacen sufrir, empobrecen nuestra vida, disminuyen nuestra autoestima, nos hacen sentir culpables e indefensos, al tiempo que dependientes. En este tipo de vínculos, como en todos, la responsabilidad es de ambas partes, y cortar con ellos suele ser una decisión bastante difícil.
Aquí, rituales con hielo para que comience a preparar su mente y sea capaz de dar un adiós definitivo a todo tipo de vínculo dañino.
AMOR NO CORRESPONDIDO
Es muy caro el precio que se debe pagar por mantener a nuestro lado a alguien que no puede correspondernos con el amor que merecemos. Esta situación enfermiza de querer retener a alguien a toda costa, y aceptar sus migajas de afecto es algo con lo que debe terminar ya mismo. A continuación, la primera fórmula mágica.
Proceda así:
Haga un licuado con agua, limón y hojas de perejil, colóquelo en un vaso de vidrio, introduzca un papel con el nombre de la persona y agregue unos granos de pimienta. Tape la boca del vaso con un papel de aluminio y guarde en el congelador, diciendo:
“Amor te di, pimienta me devolviste, ahora congelado quedas para dejar mi corazón en paz. Quede yo limpio de ti y listo para la llegada del verdadero amor”.
Al cabo de 7 días, saque del congelador y encienda encima del hielo una vela violeta. Recite así:
“Amor te di, pimienta me devolviste, ahora derretido estás y mi corazón, en paz. Quedo yo limpio de ti y listo para la llegada del verdadero amor”. Deje allí, hasta que se consuma la vela y se derrita el hielo. Luego, tire todo lejos de su casa.
DEPENDENCIA AFECTIVA
Por temor injustificado a quedar solos, por inseguridad e historias familiares de abandono, algunas personas sienten, a veces de modo inconsciente, que no son nadie sin su pareja. Si usted es de los que piensa así, llegó el momento de declarar su independencia.
Haga lo siguiente:
Consiga dos carozos, uno grande y otro pequeño. Envuelva el grande en un papel con su nombre (lo representa a usted) y el pequeño, en un papel con el nombre de la pareja tóxica. Ahora, introdúzcalos en un vaso de vidrio con agua y sal. Revuelva tres veces y tape con papel de aluminio. Meta en el congelador o freezer, conjurando:
“Todo es relativo, todo cambia, tú allí y yo aquí, yo aquí y tú allí. Declaro mi independencia definitiva, queda congelado y finalizado mi sometimiento y neutralizada tu cobarde soberbia”.
Al cabo de 7 días, saque el vaso del congelador y rompa el hielo, clavando varias veces un cuchillo mientras repite el conjuro. Luego, arroje los restos a un curso de agua.
CONTRA VENTAJEROS Y ABUSADORES
Sin darnos cuenta, podemos vincularnos con personas que siempre tratan de sacar provecho de nosotros, son personas que se acercan por algún interés. Hágase un favor a usted mismo y logre que estas personas sigan su camino, y dejen de absorberle su energía vital.
Proceda así:
Confeccione un pequeño muñequito de tela negra, rellénelo con algodón y cosa los bordes. Pínchele un papel con el nombre del abusador.
Coloque este muñeco cabeza abajo en un vaso de vidrio. Agregue al vaso algunos porotos y luego llene lentamente con agua. Tape con papel de aluminio y lleve al freezer. Mientras prepara este hechizo, conjure así:
“Si quieres beneficios, tendrás que conseguirlos, deja de succionar los porotos ajenos y gánalos tú mismo”.
Luego de siete días, entierre todo en un descampado.