Diferencia entre conjuro y ritual
Un conjuro es una fórmula mágica con la que se pretende realizar diversos actos mágicos, principalmente el de hacer un hechizo, invocar una divinidad o una fuerza sobrenatural para pedir su intervención, o el de exorcizar o ahuyentar el mal. Pretende producir efectos sobre la realidad mediante procedimientos sobrenaturales de carácter litúrgico. Así pues podríamos decir que es una invocación que se hace bajo la emanación lumínica de un Ser Superior para que un inferior cumpla el mandato. Este conjuro tiene un gran poder y debemos tener mucho respeto y prestar muchísima atención sobre qué y a quién conjuramos, porque las consecuencias de un conjuro mal hecho pueden ser nefastas.
Ésta puede ser tangible o simbólica y en casos de prácticas de conjuros negros, generalmente se realizan con la finalidad de ganar un favor por parte de las entidades. La etapa final de los conjuros y los hechizos es el cierre, en donde se le da solemnidad a la clausura de la práctica y en donde se debe disolver todo esa ambiente mágico creado en el inicio. Debemos destacar que si consideramos todos estos elementos como ritual se puede distinguir el paralelismo que hay entre realizar conjuros y la estructura de las religiones monoteístas; un ejemplo muy apropiado es el de la misa cristiana.
Existen diferentes tipos de conjuros, algunos son considerados beneficiosos, otros dañinos. Algunos afectan al hombre, otros van dirigidos a animales, otros a objetos. Su propósito también puede ser de lo más variado: mejorar la salud, curar alguna enfermedad, buscar el amor, mejorar la situación económica, fertilidad, protección, exorcismo de espíritus, victoria en la guerra, etc. En general a los que se recurre con mayor frecuencia suelen tener relación con el amor, el dinero, o la salud. Los conjuros malvados se dirigen básicamente a las mismas áreas, pero en sentido negativo: causar enfermedad, causar la pérdida del amor, etc.
Un conjuro puede estar dirigido sobre uno mismo, es decir la persona que realiza el conjuro es también la receptora de sus efectos, o sobre otros, pero según su orientación se pueden clasificar en "bendiciones", si son conjuros positivos, o "maldiciones" si sus intenciones son malévolas. Existen muchos tipos de conjuros: de amor, amarres, de amor vudú, para enamorar, para que el amor perdido regrese, de amor wicca etc.
Los conjuros, ya sean estos de magia, de amor, de pasión o realizados por intereses materiales y personales, han adquirido y mantenido una estructura general: la preparación en donde se disponen los lugares y los elementos necesarios junto con las personas que formarán parte de los conjuros; la apertura es la que inicia el ritual, creando una suerte de “ambiente mágico” apropiado, produciendo a su vez un efecto de comunión entre las personas que están participando del conjuro. .
La invocación es en donde se le pide, suplica o exige a una entidad sobrenatural o deidad la cooperación de sus fuerzas, ya que estas serán las encargadas de concretar y materializar los efectos del hechizo; la ejecución realiza aquellos actos mágicos que se destacan por ser más bien actos rituales que representan al corazón del hechizo y precisamente esta es la acción que pretende modificar el curso de la realidad mediante la invocación y advocación de las entidades sobrenaturales que interferirán en los conjuros; el sacrificio es lo que se le suele ofrecer a las entidades sobrenaturales en ofrenda por su colaboración.
Por otro lado, un ritual es una ceremonia pagana o cristiana donde se dan ofrendas a los dioses o se adora cualquier objeto que representa algún Dios. La humanidad desde sus orígenes ha recurrido a los rituales para agradecer o aplacar a la naturaleza. Todos los pueblos utilizan hoy en día los rituales a través de las distintas religiones. Algunos rituales son festivos, mientras que otros se desarrollan de forma solemne. Los rituales se llevan a cabo de acuerdo a la tradición.
Los rituales se realizan por diversas razones, tales como la adoración de un dios. Los rituales responden a una necesidad, en el caso de los religiosos para pedirle a un dios mejores cosecha, caza abundante, etc. o responden a una costumbre como los cotidianos. Un ritual es una celebración o en honor de un acontecimiento o una ocasión y puede ser muy simple o muy elaborada. Por lo tanto un ritual serían una serie de acciones realizadas principalmente por su valor simbólico, que es prescrita por una religión o por las tradiciones de una comunidad.
La primera diferencia entre conjuros y rituales es que el conjuro dentro de la magia se utiliza junto algunos complementos como pociones y preparados, pero especialmente enfocados en concentrar la energía y relatar cánticos o rezos en forma enfocada, de forma de lograr invocar el favor de determinada deidad o entidad. En el conjuro se utilizan mucho los movimientos de mano, en especial en forma circular. Por otra parte, entre conjuros y rituales, los últimos también involucran en cierta forma el cántico y los elementos complementarios, pero se trata más de una ceremonia extensa en la que se deben seguir una serie de pasos estrictos que deben desarrollarse en un cierto lugar, en una cierta forma y en un momento específico.
El ritual por lo general se desarrolla en forma colaborativa, es decir, de él participan varias personas o miembros de una secta o comunidad específica (aunque no siempre), mientras que los conjuros pueden ser ejecutados en forma individual. Para concluir, conjuros y rituales se diferencian además de los hechizos, que tienen como distintivo un uso intensivo y extensivo de velas, hierbas, animales, y otros elementos y que al igual que los conjuros utilizan oraciones, que pueden ser expresadas oralmente o mentalmente, y que pueden llegar a requerir múltiples sesiones. El hechizo es una mezcla de ambos tipos, pero tiene mayor complejidad.