La turmalina rosa
La turmalina es un silicato, de color muy variable, a veces incluso dentro de un mismo cristal. Las distintas variedades reciben nombres diversos: la turmalina negra recibe el nombre de chorlo, la roja/rosada: rubelita o Piedra de Cristo, la azul: indigolita, la amarilla: peridoto de Sri Lanka y la incolora: acroíta, la parda: dravita, la verde: verdelita o sandía la variedad combinada de verde y rosa. Por la gran variedad de colores y tonalidades que presenta se la denomina "piedra camaleónica". Muchas tienen una gran similitud con otras piedras preciosas. La turmalina verde se parece mucho a la esmeralda, la roja al rubí, la amarilla al topacio, la azul celeste a la aguamarina y la azul al zafiro, por poner algunos ejemplos. En algunas ocasiones el color no es tan uniforme, como es el caso de la turmalina cabeza de moro que es clara en la base y negra en la parte superior.
Es una de las piedras más bellas que existen y se ha utilizado y se utiliza como amuleto por ser uno de los grandes protectores de la salud. Dentro del esoterismo se le atribuyen a la turmalina poderes que varían según el color. Sin embargo la turmalina negra es la más famosa y la que acumula más poderes mágicos. De ella dicen que es la más poderosa de las piedras negras porque crea un fuerte campo protector alrededor de la persona. El "chorlo" es una piedra magnífica y poderosa que anula el estrés, el miedo y la angustia. Capaz de eliminar las energías negativas y de ayudar al crecimiento espiritual. Combate el mal de ojo y es muy recomendable en meditación porque nos ayuda a superar momentos confusos. Si la juntamos con el cuarzo transparente forman una poderosa combinación que repele situaciones fatales y crea ambientes limpios y sanos.
La Turmalina Rosa encuentra a veces su propio camino con la ayuda de esa piedra. No hay compañero mas fiel para un corazón y una mente en equilibrio que la presencia amistosa mas dotada para la expresión alegre del amor. Una vez mas, es interesante comprobar que de la fusión de dos piedras nace un propósito común como este. Cuando la Lepidolita asume su función interiorizada, es decir la construcción de un puente que facilite la comunicación entre la mente y el corazón, la Turmalina Rosa expresara el poder dinámico del amor hacia el mundo exterior.
Estas piedras son muy útiles para personas tímidas, introvertidas o incapaces de exteriorizar la expresión de su amor. La exuberancia de la Turmalina Rosa, vinculada íntimamente a la naturaleza suave y dulce de la Lepidolita facilita una transmisión mas fluida de pensamientos y sentimientos unificados por medio del chakra del corazón. Demos las gracias a la Lepidolita y la Turmalina Rosa por unirse en un camino común, en un proceso tan sumamente útil para la consecución de todos los objetivos mayores de la humanidad.
PROPIEDADES CURATIVAS Y ESPIRITUALES
Esta piedra es símbolo de la pasión, posee la vibración del amor, una de las piedras mas positivas y elevadas.
- Aviva el amor y la atracción.
- Indicada para las afecciones de la piel.
- Relaja el sistema nervioso, permite la concentración.
- Proporciona gentileza y ternura
- La turmalina concede serenidad, sabiduría e intuición.
- La turmalina no absorbe la energía negativa, sino que la expulsa hacia el tierral descarga y libera a la persona que lleva esta piedra.
- Es eficaz contra la tristeza y la melancolía.
- Tiene la propiedad de rejuvenecer.
- Destruye las formas de pensamiento negativas.
- Aumenta la capacidad de discernir y tomar decisiones.
- Portadora de la prosperidad, es muy útil para los estudiantes.
- Eficacia para la meditación.
- Alivia los dolores producidos por el cáncer y otros problemas agudos.
- Abre los chakras: De la garganta, el corazón, plexo solar y bazo.
Afinidad con los signos: aries, tauro, géminis, cancer, leo, virgo, escorpio, sagitario, capricornio y acuario.