El Zircón o Circón
Es el mineral más antiguo que se conoce en la tierra, y de los más abundantes en la corteza terrestre, normalmente se presenta en cristales de color pardo. Cristaliza en sistema tetragonal, en cristales prismáticos equidimensionales, bipiramidales; también se les encuentra en cantos rodados. De brillo vítreo adamantino o resinoso, siendo transparentes, enturbiándose con el tiempo hasta volverse translúcido. Puede aparecer fisuras en forma de aguja o lineas blanquecinas orientadas, pero no rectas.
Hay tres tipos naturales de circón: bajo, medio y alto. La variación se debe principalmente a las diferencias en el peso específico y en el índice de refracción. Al tener el índice de refracción más alto entre las piedras preciosas naturales, con la sola excepción de los diamantes, el brillo del circón alto no es inferior al de ninguna otra piedra. A medida que la temperatura sube, el índice de refracción también aumenta, haciendo que la piedra preciosa sea aún más espectacular. A pesar de su brillo, el circón es bastante quebradizo y se astilla o se raya con relativa facilidad.
Se encuentra sobre todo en: Ceilán, Sry Lanca, Australia, Brasil, Estados Unidos, Tailandia, Noruega, Rusia
Propiedades curativas y espirituales
El circón esta indicado para la meditación, armoniza la materia y el espíritu. Es el símbolo de la lealtad.
Tiene una utilidad importante en el desarrollo de las actividades mentales, incita a la prudencia y a la sabiduría: desarrolla la habilidad en asuntos de negocios, combate el insomnio.
Es adecuado para el tratamiento de afecciones del corazón.
Abre los chakras: la cabeza y la garganta
Afinidad con los signos: Géminis, Cáncer, Virgo, Escorpio, Sagitario, Capricornio y Acuario
Afín al segundo chakra, armoniza los cuerpos etérico, mental y emocional con el cuerpo físico, totalizando, e integrando la energía de la persona.
A nivel material se le relaciona con la abundancia, el trabajo, aportando sabiduría en relación a los asuntos económicos.
Se la relaciona con la lealtad.
Se considera activo frente a la fiebre y a los cólicos intestinales, según la tradición ayurvédica.
Sanador del sistema circulatorio en alteraciones cardíacas, fortalecedor de venas y arterias.
Ayuda a tener sueño reparador y buenos sueños.
Desarrolla la actividad mental.
En la edad media se decía que protegía contra la peste.
Según sus colores:
Blanco, muy indicado para mejorar los procesos mentales.
Amarillo, aumenta el vigor sexual, atraer el amor y evitar depresiones.
Rojo, estimula la riqueza y la salud.
Marrón o Jargón y verde o Diamante de Ceilán, para estimular el bienestar económico.
Naranja o Jacinto aumenta la belleza y protege en los viajes.