Desdoblamiento astral
Muchas personas alrededor del mundo están teniendo experiencias lúcidas fuera del cuerpo De hecho, todos nos desconectamos de nuestro cuerpo físico. Éste es un fenómeno natural que ocurre todas las noches mientras dormimos, a pesar de que la mayoría de las personas no se den cuenta de ello. El desdoblamiento astral consiste en desprenderse a voluntad del cuerpo físico a la hora de dormir y viajar a la 5ª dimensión superior, también conocida como la Primera Región de los Cielos.
Con el desdoblamiento astral podrás adquirir la sabiduría de los profetas, viajar a lugares jamás imaginados, ver el pasado y el futuro, conocer civilizaciones de otros planetas y abrir las puertas al conocimiento universal. El ser humano es un compuesto de cuerpo y alma, pero más que cuerpo es un alma. Estos cuerpos están unidos por un cordón de plata. San Pablo nos dice en la Biblia: "Poseéis cuerpo carnal y cuerpo espiritual". Cuando la persona duerme, el alma o cuerpo astral sale del cuerpo físico al mundo de los sueños. En el sueño nos vemos como en una película, en donde cada uno es el actor principal.
En el sueño y con el alma en estado inconsciente, podemos viajar a otras ciudades, a otros países, hablar con personas que no conocemos, hablar con las almas de personas que ya murieron, ver cosas que van a suceder, etc. Al despertar, el alma penetra nuevamente al cuerpo físico y es posible que la persona traiga o no el recuerdo de sus sueños.
Existen dos factores requeridos para uno saber que está fuera del cuerpo en una experiencia de desdoblamiento astral. El primero es la lucidez, que es la capacidad de permanecer consciente de lo que está sucediendo, manteniendo las capacidades que normalmente utilizamos en nuestro estado despierto diario. Actitudes como interpretación y análisis, tomar decisiones, y tener el mismo grado, o incluso un grado mayor, de control sobre lo que hacemos. El segundo factor es la habilidad para recordar la experiencia de desdoblamiento astral al despertar.
La experiencia de proyección astral o desdoblamiento astral es un fenómeno completamente diferente de un sueño ordinario o de un sueño lúcido, porque no es un evento imaginario. La experiencia de desdoblamiento astral es una situación real vivida en otra dimensión, o plano. Los sueños ordinarios ocurren, generalmente, sin cuestionarnos las situaciones absurdas e incoherencias que se producen en contraste con lo que conocemos en la realidad cotidiana. En un sueño lúcido comenzamos a reconocer que estamos soñando, y muchas veces tenemos algún grado de control sobre los elementos del sueño. Sin embargo esto es todavía un sueño común. Podríamos decir que los sueños lúcidos están en el camino de desarrollar el grado de lucidez y de discernimiento necesario para mantener el control en una experiencia lúcida de desdoblamiento astral.
En un desdoblamiento astral consciente, uno puede encontrarse con un amigo, que también está fuera del cuerpo, y ambos pueden recordar el mismo evento. También es posible visitar y hablar con personas que ya han muerto. Es posible además, visitar lugares y personas a voluntad. Algunas veces durante un desdoblamiento astral, es posible para un individuo confirmar su experiencia. Por ejemplo, la persona puede tener su cuerpo dormido, y simultáneamente estar proyectada presenciando un incidente a una hora y lugar específico. Luego, al día siguiente, esta misma persona al encender la televisión, ve un reportaje en las noticias sobre un hecho idéntico que concuerda con la hora y lugar de su experiencia.
A través del desdoblamiento astral el individuo puede alcanzar estos mismos beneficios y muchos más. Los viajes astrales están siendo estudiados intensamente debido a su gran potencial. A través del acceso a otros planos de existencia y a la comprensión adquirida en el manejo de esta experiencia, uno puede reemplazar las creencias no corroboradas, con experiencias personales directas. La lucidez durante el desdoblamiento astral permite el entendimiento de la conciencia humana y la interrelación humana con la dimensión de la existencia invisible, sutil, pero real, que nos rodea y afecta nuestras vidas en todo momento. Es por esto, muy importante, informar a quienes estén abiertos a este fenómeno, para que puedan beneficiarse de esta experiencia.
Durante el sueño onírico actuamos sólo como meros espectadores de las imágenes y no nos percibimos interactuando con ellas, durante la experiencia de viaje astral somos partícipes de las situaciones que se producen a nuestro alrededor, tal como ocurre en el estado de vigilia.
Experiencia astral y sueño se diferencian en que la experiencia extracorpórea permite la ejecución de acciones extrafísicas planificadas durante el día, mientras que un sueño no puede ser programado. La experiencia de viaje astral permite la participación de diversas personas proyectadas en un mismo lugar y a una misma hora. No puede ocurrir que dos personas tengan el mismo “sueño”. Al salir y entrar del cuerpo podemos sentir varias sensaciones características que no se perciben en el sueño. Cuando percibimos algo que podemos comprobar al despertar evidencia una experiencia de viaje astral.
La sensación de libertad y expansión es propia de la experiencia fuera del cuerpo y no ocurre en el sueño. En la experiencia de viaje astral podemos tener determinación clara sobre los actos y vivencias extrafísicas. Observar el propio cuerpo físico tumbado en la cama es una constatación de la experiencia extracorpórea. En la experiencia de viaje astral podemos determinar por la voluntad el momento de la vuelta al cuerpo. La producción de la salida fuera del cuerpo a través de una experiencia de conciencia continua, sin lapsos, manteniendo la lucidez ininterrumpidamente tanto en la entrada como en la salida del cuerpo, es una condición singular de certeza para la persona de la realidad de la experiencia.