Ritual de prosperidad en Nochevieja y Año Nuevo
En Navidad todo son deseos de prosperidad, de felicidad, de cambio y deseos para que todos nuestros proyectos se cumplan; sin embargo, es importante que no nos quedemos solamente en la intención, realizando físicamente un pequeño “ritual” de limpieza y atracción de prosperidad para la tarde del día 31
Para ello vamos a usar una regla básica en Feng Shui “vaciar para llenar”
* Como regla general y antes de realizar cualquier “cura” Feng Shui, pondremos orden, eliminando montones de libros, ropa etc.
* Todos los días traemos cosas a casa, periódicos, revistas, e innumerables objetos pequeños o grandes que sin darnos cuenta van agotando nuestro espacio vital. Echa un vistazo a tu alrededor… ¿cuantos objetos inútiles ves?
* Si lo que deseamos para los próximos meses es atraer la prosperidad en el amor y nuestras relaciones, revisaremos nuestros armarios en busca de esa ropa que ya no usamos, que ya no nos ponemos, que guardamos de antiguas relaciones y que únicamente llena el espacio que podría ocupar las nuevas relaciones
* Aparatos electrónicos averiados, figuras decorativas rotas, objetos incompletos o deteriorados… si este año no los has reparado, nunca lo harás. Que mejor momento para tirarlos a la basura
* Y hablando de basura… papeleras, cubos de basura, reciclajes etc. ¡Vacíos! Antes de empezar el año; esto hará que tus proyectos fluyan, sin lastres, o viejas y desfasadas ideas, dejando paso a las nuevas
* Si lo que quieres es prosperidad económica, coge tres monedas iguales y llévalas en la mano al comenzar el nuevo año (mejor aun si las atas con un lazo rojo o las envuelves en un paño rojo).
También, puedes colócalas en el área SE de tu casa o poner en este sector, otros símbolos que simbolizan prosperidad, como joyas o piedras preciosas (o cristales brillantes que las imiten)
* Como decíamos, el rojo atrae la buena suerte y la prosperidad, ¿por que no vestir o llevar algo rojo esta noche?
Realizando alguno de estos simples actos, comenzaremos así el nuevo año con espacio suficiente y la energía necesaria, para que la prosperidad y felicidad deseada pueda entrar y llegar a nuestra vida