Los cinco animales celestiales
El concepto de Animales Celestiales pertenece a la escuela de las Formas y su aplicación es necesaria para realizar un estudio de Feng Shui.
Estudia el entorno exterior que rodea a la construcción y sus principios también se aplican a la colocación del mobiliario dentro de la casa, aunque siempre supeditado al resultado que nos proporcionan las otras escuelas.
El sentido poético que la cultura china aplica en todas sus artes, añadido a la estrecha relación que tiene el Feng Shui con la naturaleza hace que se describa el lado derecho e izquierdo, parte trasera y delantera y centro de la construcción en terminología de animales: tigre blanco, dragón, tortuga, ave fénix y serpiente.
Las características del entorno son factores muy importantes para determinar el Feng Shui de un lugar, evaluando este se determina la calidad de energía que circula a través de el.
Los cinco animales celestiales:
Serpiente:
Representa el espacio que ocupa la construcción y respecto a ella, se ubican el resto de los animales celestiales que aportarán las características que requiere cada zona y el tipo de protección que nos dan.
Tortuga:
Situada en la parte trasera de la edificación (a la espalda de la serpiente).
Una buena tortuga aporta solidez, protección y estabilidad.
Puede estar representado por una montaña, un edificio alto, árboles o cualquier estructura que arrope la construcción.
En el ambiente interior al realizar cualquier actividad deberás tener la espalda protegida (sentarse con la espalda hacia la pared)
Es el animal más importante y necesario, es mejor disponer de una buena tortuga que de cualquier otra protección que nos pueda dar otro animal.
Ave Fénix:
Es el espacio que hay en el frente de la construcción (de frente a la serpiente) y representa las buenas oportunidades.
La mejor disposición de este lugar es que sea algo más bajo que la tortuga, un sitio abierto y despejado para que el chi favorable entre sin obstáculos.
A la hora de ubicarnos en los ambientes interiores, para realizar cualquier actividad, nuestro frente también debe dar a un espacio abierto (colocar los escritorios de cara a la pared es un error).
Dragón:
Es el lado izquierdo de la construcción (a la izquierda de la serpiente), representa la sabiduría y la prosperidad y es importante contar con una buena protección en este lado en forma de edificio, colina, árboles o vegetación que protege a la casa en este punto.
Después de la tortuga es la protección más beneficiosa.
Ubicado en la parte derecha de la serpiente, simboliza la fuerza.
Los edificios, colinas o vegetación situados en esta zona deben ser más bajas que en el lado del dragón.
Tigre:
Situado al lado derecho de la construcción (a la derecha de la serpiente), representa la fuerza.
La estructura arquitectónica o natural que este en este lugar, es importante que sea más baja que la del dragón.