¿Quien percibe el aura?
Nuestra visión periférica es quien percibe el aura. En el campo visual de un ojo hay 130 millones de bastones receptores, la mayoría de los cuales se localizan en la periferia de dicho campo. Son los que funcionan en condiciones de poca luz y constituyen nuestra visión nocturna. Trabajando a partir del centro del campo visual y en la zona de los bastones hay unos 7 millones de conos receptores que operan mejor a la luz del día.
Los bastones receptores sintetizan la rodopsina, también llamada púrpura visual, que es extremadamente sensible a la luz baja. Para ver el aura la luz debe ser tenue, ya que son los bastones receptores quienes perciben la luz sutil de las emanaciones áuricas.
Para empezar a entrenar la mente para ver las auras lo haremos con un ejercicio muy sencillo, el cual consiste en sentir la presencia de nuestro propio campo de energía.
Extendamos los brazos ante el cuerpo con las palmas de las manes enfrentadas entre sí, a unos 40 centímetros de distancia. A continuación, acerquemos las palmas de las manos con mucha lentitud y regularidad. Cuando vayamos acercando, las manos, notaremos una resistencia entre ellas. Esta resistencia es el campo de energía.
Otro ejercicio que nos ayudara a percibir el área iris del aura, es el siguiente:
Meditemos sobre los colores y aceptemos la posibilidad de percibirlos. Imaginemos que percibimos los colores.
Dejemos entrar en nuestra conciencia las energías sutiles.
Si podemos hacerlo sin sentir que "fingimos" percibir los colores, probablemente empezaremos a ser conscientes de la sensación de los mismos. Esto no necesariamente se producirá de inmediato; a algunos nos resultara mas fácil que a otros. Pero, cuando aceptemos la posibilidad, nos haremos más receptivos a las emanaciones de la "Energía Universal".