Prepárandonos para observar el aura
Cuando intentemos ver por vez primera el aura, no nos desanimemos si no sentimos o vemos nada. Debemos darnos tiempo y tener fe. Algunas personas experimentan un despertar instantáneo, pero a otras suele llevarles algún tiempo. A veces el problema radica en que se esta intentando con demasiada fuerza, situación que puede destruir la sensibilidad. Cuando esto nos suceda, debemos esperar cierto tiempo antes de intentarlo de nuevo.
Hay varios métodos sobre el modo de observar el aura. En la mayoría de ellos se recomienda trabajar en un cuarto oscuro, con una luz pequeña. También se recomienda entrecerrar los ojos para que la mirada tenga una dimensión mas profunda.
Resulta más fácil observar el aura cuando la persona esta de pie ante un fondo de color claro, blanco de ser posible. Los colores físicos y los objetos materiales pueden distraernos, y resulta más fácil ver el aura en condiciones favorables.
La iluminación es un elemento esencial para "leer" el aura, sobre todo cuando no se tiene experiencia; lo mejor es intentarlo en condiciones óptimas. Asegurémonos de colocar una fuente luminosa detrás de nosotros cuando nos sentemos frente a la persona a la cual se le va a interpretar su aura. Lo mejor es la luz natural, ya sea la luz del sol que entra por una ventana o la luz de una veta. Comprobemos que en la habitación no haya corrientes de aire que produzcan sombras en movimiento, al alterar la llama de la vela.
Normalmente es necesario realizar varias pruebas hasta dar con la iluminación adecuada a nuestras necesidades particulares.
Empecemos visualizando el aura de nuestra pareja o de algún amigo. por supuesto, las posibilidades de éxito serán mayores si la persona participa de buen grado en el experimento. Es aconsejable buscar un amigo interesado en ver el aura y turnarnos para hacerlo.
Pongamos música suave y relajante.
Tengamos el conocimiento de lo que hacemos antes de intentar cualquier visualización, meditación o lectura del aura. Esto es, que conozcamos los diferentes pasos.
Tanto nosotros como la persona, a la que se le va a leer el aura debemos empezar por cerrar los ojos y respirar profundamente para relajarnos. Sentémonos con el tronco recto, las piernas sin cruzar y los pies apoyados en el suelo. Coloquemos las manos sobre nuestro regazo con las palmas hacia arriba.
Después respiremos hondo y abramos los ojos lentamente: no los abramos del todo. Recordemos que no debemos concentrarnos en intentar ver el aura. Relajémonos y procuremos mirar el perfil de la persona que tenemos enfrente.
Al cabo de un rato, la rodopsina decolorara los bastones y nos obligara a cerrar de nuevo los ojos para permitir que se resinteticen. Al cerrar los ojos es probable que veamos imágenes que se hayan grabado en nuestra mente. Aparecerán como una imagen en negativo. Dejemos que estas imágenes se fundan y luego volvamos a abrir los ojos. Repitamos el proceso tantas veces como sea necesario.
Se recomienda tener un cuaderno para anotar las observaciones. Si trabajamos varias veces con la misma persona, es interesante comparar las notas para ver si hay cambios o coincidencias entre una sesión y otra,
Tomemos nota de los colores, formas, sentimientos, símbolos o imágenes que hayamos percibido.
La práctica de este método nos fortalecerá la visión del aura y cada vez nos resultara más fácil. No nos desanimemos, el desarrollo de este método suele llevar tiempo. Algunas personas ven los colores perfectamente, mientras que otras sólo aprecian un halo azul.
Recordemos que no debemos esforzarnos en ver el aura; relajémonos y dejemos que ocurra naturalmente. Al poner demasiado empeño, nuestra visión convergente entra automáticamente en funcionamiento.
Cuando los músculos del ojo se fatigan, la posición de este varía ligeramente, Y entonces vemos la imagen grabada donde deberíamos de ver el aura. A esto se le conoce como "falsa aura", la cual es de un color opaco, no traslucido como el aura verdadera.
Al realizar la lectura del aura, disfrutemos de la experiencia y estemos alegres.
Cuando intentemos por primera vez "leer" el aura de una persona, hagamos que nos formule una pregunta cuya respuesta se pueda verificar fácilmente.
Al ver o sentir el aura por primera vez, necesitaremos adquirir cierto grado de confianza. Por este motivo, es conveniente que la persona cuya aura estemos observando, responda con sinceridad a las interpretaciones que le estamos planteando.
Para complicar mas las cosas, es posible que los colares que observamos parezcan erróneas, porque los pensamientos de la persona, tal vez no correspondan a los que se tengan en ese momento, pero si pueden corresponder a un suceso posada o a un recuerdo inconsciente.
Así, un lectura del aura, puede ser muy importante, a pesar de una negativa por parte de la persona que se esta observando.
Aquí es, en estos primeros intentos, donde nos haremos distintos de los demás. Si encontramos fracasos tendremos que continuar con decisión.
Todas las etapas de la percepción extra sensorial exigen esfuerzo, a pesar de la actitud negativa de los que nos rodean.
¡Pidamos permiso!
El mirar en el interior del aura de una persona es una cuestión muy personal. Pidamos permiso antes de adentrarnos en ese mundo de mensajes sutiles. Si entramos sin el es fácil que percibamos una imagen distorsionada.
Cuando ya creemos que "vemos" el aura, tenemos que dar el siguiente paso; realmente ver el aura.
¿Como es esto?
Lo que sucede en la mayoría de los casos, es que nuestro ser interior intuye las emanaciones áureas y las forma en la mente mediante los órganos visuales. Tal vez lo que estamos viendo es solo la capa física del aura.
Esto es apenas el comienzo, debemos seguir intentándolo y continuar capa tras capa, hasta que podamos percibir su Luz.