Diccionario de las Mancias - H - I - K
En el mundo actual utilizamos multitud de métodos y técnicas heredadas la mayoría de ellas de la antigüedad, como el tarot, el I ching, la quiromancia, las runas, la bola de cristal o la propia astrología. Pero también las hay muy sofisticadas y extravagantes como la tiromancia, que es la adivinación mediante la coagulación del queso, o la codonomancia, adivinación a través de las campanas. En muchas de estas técnicas sus nombres terminan en “mancia”, es un sufijo derivado de la palabra griega mantis, que significa “adivino” o “profeta”.
HIPOMANCIA:
Adivinación que utilizaban los Celtas, los cuales sacaban sus pronósticos de los relinchos y movimiento de unos caballos blancos criados con todo esmero y veneración a expensas del pueblo.
En unos bosques sagrados, se alimentaban los caballos en el templo de los dioses, y los hacían salir antes de declarar la guerra a sus enemigos, cuando el caballo empezaba a andar con la pata derecha era favorable, cuando lo hacía con la izquierda, era mal agüero y renunciaban a la batalla.
HIDROMANCIA:
Arte de predecir el porvenir por medio del agua, esta adivinación es debida a las personas.
- Primera: Cuando a consecuencia de las invocaciones u otras ceremonias mágicas, aparece sobre el agua los nombres de algunas personas o cosas que se deseaba conocer, escritos al revés.
- Segunda: Se servía de un vaso lleno de agua y de un hilo del cual estaba suspendido un anillo que golpeaba cierto numero de veces el vaso.
- Tercera: Echaban sucesivamente y a cortos intervalos 3 piedrecillas en el agua limpia y tranquila y de los círculos que se formaban en su superficie como de su intermitencia deducían presagios.
- Cuarta: Examinabas atentamente los movimientos y la agitación de las olas del mar, se sacaban los presagios del color del agua y de las figuras que se creían ver en ellas.
- Sexta: También por una especia de hidromancia los antiguos germanos aclaraban sus sospechas concernientes a la fidelidad de sus mujeres, arrojaban al RHIN, a los hijos que parían, si sobrenadaban los tenían por legítimos, si se iban al fondo por bastados.
- Séptima: Llenabas un cazo de agua y después de haber pronunciado encima ciertas palabras, hervían el agua y se salían las palabras por los bordes.
- Octava: Ponían agua en un jarrón de vidrio o cristal añadían una gota de aceite y veían en aquélla agua, como en un espejo aquello que deseaban instruirse.
- Novena: Las mujeres germanas practicaban otra especie de hidromancia, examinaban los ríos en los golfos y torbellinos que se formaban para poder adivinar el porvenir.
ICTIOMANCIA:
Adivinación antiquísima que se practicaba por medio de las entrañas de los pescados.
Refiere Plinio que en Mina y en Lisia, se tocaba la flauta con tres intervalos para aproximar a los peces a la fuente de Apolo, llamada Cirius, añade que los peces nunca se aproximaban, pero los cuales si comían inmediatamente la carne que se les echaban eran un feliz agüero, si la rehusaban lo contrario.
KEFALONOMANCIA:
Adivinación que se practicaba haciendo varias ceremonias sobre la cabeza de un asno, era muy familiar entre los Germanos y los Lombardos, posteriormente, sustituyeron al asno por una cabra, las practicas se hacían poniendo la cabeza de un asno, sobre carbones encendidos y recitando las plegarias, pronunciaban los nombres de aquellos de quienes sospechaban que habían cometido algún delito y observando el momento en que las mandíbulas del animal se chocaban, el nombre pronunciado en aquel instante, designaba el culpable.