Signo del mes: Capricornio. Perfil
Capricornio y las Flores: Dalia
La leyenda: Esta flor de origen americano llegó a Europa un invierno, cuando todavía no había florecido, y se ofreció como presente a Luis XIV, el Rey Sol. Durante meses se la consideró una planta de lo más vulgar, un tubérculo de aspecto parecido a la patata de aspecto poco agradable. Pero cuando llegó la primavera, la dalia floreció, y su belleza dejó sorprendida a toda la corte del Rey. El mismo Luis XIV pasó a adoptarla como una de sus flores favoritas.
Propiedades: Algunas tribus de indígenas americanos cubrían las raíces de las dalias con cenizas y las asaban a fuego lento. Para ellos, se trataba de un manjar exquisito y como tal lo disfrutaban. En Europa, durante las largas épocas de hambruna, también se consumieron sus raíces, aunque no se las consideraba un manjar.
Una anécdota: Esta flor debe su nombre a un botánico sueco, llamado Andreas Dahl, que dedicó muchas horas al cultivo de las dalias, con la finalidad de estudiar sus propiedades y características.
Alegoría de Capricornio
“A ti, Capricornio, te pido el sudor de tu frente, que puedas enseñar a los hombres a trabajar. Tu tarea no es sencilla, pues sentirás todos los trabajos de los demás encima de tus espaldas, pero como compensación a tus cargas pongo la responsabilidad del hombre en tus manos”.
Capricornio y los besos
Le gusta controlar todo, hasta la cantidad de besos y el lugar. Disfruta mucho de los encuentros eróticos, pero no son muy demostrativos. Para que un capricorniano se descontrole tiene que suceder algo que sea muy fuerte, como una posible perdida. Si su pareja le exige que sea más afectuoso y realmente el capricorniano/a ama y tiene miedo a separarse, puede cambiar su actitud. Pero cuando vuelve a sentirse seguro dejará de besar automáticamente. Sus besos, al principio de una relación, son muy apasionados, pero luego se va enfriando. Estos nativos pueden escribir una poesía muy profunda y romántica sobre un beso, pero no son capaces de experimentar con el cuerpo, lo que expresan en sus descripciones literarias.
Enseñanza de Capricornio
Capricornio muestra la necesidad de aprender la constancia del esfuerzo, la planificación del tiempo, el crecimiento acumulativo en busca de la perfección, la paciencia ante el presente, etc. pero, sobre todo, enseña la soledad de la cumbre que, aplicada al crecimiento psíquico, se refiere a la soledad de la culminación del desarrollo del yo personal: el paso imprescindible y último del conocimiento de la propia mismidad como algo exclusivamente propio. Nos muestra el núcleo esencial de nuestro yo más acá de cualquier consideración colectiva; la terrible soledad esencial del ser, a la que tanto nos cuesta enfrentarnos; el grano de arena introducido en una ostra dará lugar, posteriormente, a la perla de nuestro trascendente, pero que primero es necesario vivenciar como grano de arena, como mota de polvo insignificante y aislada. El símbolo de la cabra con cola de pez representa la integración razón, fantasía a través de la imaginación dirigida y de la simbología.
Ideal Cósmico
Capricornio es la Justicia y el Órden Cósmicos, incorporados en la verdad de “lo que siembres, cosecharás”. De aquí surge la virtud del respeto para aquellos que se merecen respeto y la facultad de apreciar el ideal jerárquico, por el cual lo menor siempre sirve a lo mayor. De este principio puede provenir el engaño del formalismo o el literalismo, la creencia de que la forma es más grande que el espiritu, la letra más importante que la idea. El materialismo, como herejía o engaño, probablemente se encuentra en los tres signos terrestres, pero más en Tauro.