Escorpio. Del 22 de octubre al 22 de Noviembre
Símbolo: Escorpión, Águila, el Ave Fénix.
Planeta regente: Plutón.
Planeta co-regente: Marte.
Planeta Exhaltado: Urano.
Planeta en Detrimento: Venus.
Planeta en Caída: Luna.
Casa que Rige: Octava.
Elemento: Agua
Principio: sexo en su aspecto dinámico y creativo.
Proceso: identificación con un gran todo.
Propósito: convertirse en algo más grande; trascendencia.
Significado concreto: sexo, voluntad, celos y muerte. Magia y ocultismo. Regeneración.
Significado abstracto: tensión creativa y la conciencia de dualidad. El instinto de unirse y convertirse uno con otros a fin de participar juntos como un gran todo orgánico.
Énfasis: debe haber un fuerte impulso para convertirse en algo más grande. Relaciones sexuales o intensas pueden ser un camino para cumplir este impulso, aunque sea en un nivel.
Anatomía: órganos sexuales.
15º Escorpión: liberación creativa del poder y el propósito de relaciones.
Frase clave: deseo.
Palabras clave: intensidad, compulsivamente, penetrante, cruel, secretivo.
Caracteres positivos: motivado, penetrante, ejecutivo, ingenioso, determinado, científico, investigador, indagador, apasionado, alerta.
Caracteres negativos: vengativo, temperamental, reservado, arrogante, violento, sarcástico, receloso, celoso, intolerante.
Color: rojo sangre, rojo oscuro, carmesí.
Área del Cuerpo: órganos sexuales.
Piedras: rubí, granáte, topaz, turqueza y malaquita, opal.
Día: martes.
Animales: lobo, pantera, águila, buitre y cóndor. (Mítico: Ave Fénix).
Símbolos: el Escorpión, el Águila, la Serpiente, el Ave Fénix y la Paloma.
Piedras de nacimiento: Topaz y Opal.
Números de la suerte: 8, 17, 26, 35, 44, 53.
Signos compatibles: Capricornio, Piscis, Cáncer y Virgo.
Las gemas y piedras: piedras rojo intenso, plutonianas; como coral, granate, turmalina roja o rubelita, ópalo de fuego.
Escorpio está caracterizado por una fuerte instintividad y tendencia a impulsos violentos. Su fuerza inconsciente es a menudo demasiado potente para ser controlada y se revela de forma desordenada provocando profundas angustias existenciales. Solamente en la dialéctica Tauro-Escorpio se puede entender plenamente el sentido de la tipología de este signo, en el que el sentido de la vida y de la muerte están estrechamente ligados. Mientras que su signo opuesto, Tauro, simboliza la vida en su expresión más simple y concreta, y la sexualidad, por ejemplo, se vive como un medio de procreación, en Escorpio la sexualidad se transforma en erotismo, se vive con agresividad, con curiosidad, pero también con temor, como un momento en el que el placer y la muerte se confunden.
Esta naturaleza de Escorpio se encuentra minada por un fuego interior, animada a nivel de las entrañas por la exasperación de pulsiones violentas. Este "diablo en el cuerpo" expresa una angustia de vivir, una sed de "ser mas" mas que de "bien-estar", que busca sus afinidades en las tormentas y convulsiones de la vida. Dos grandes instintos se enfrentan en una ambivalencia intensificadora: la agresividad y el erotismo; danza endiablada de lo sublime y de lo abyecto, del cielo y el infierno, del realismo brutal y del idealismo místico, del apego y el desprendimiento, del amor y la muerte. El instinto sexual se prolonga bajo el aspecto creador: don de producir, de fecundar, de realizar en un arranque irresistible; el poder del ser es o procede del sexo y a través de este poder sexual, natural, desplazado y sublimado, a través de la integración del erotismo, animal o espiritualizado, encuentra su razón de ser. Si existe disonancia, el ser se encuentra inquieto, atormentado; su alquimia interior destila los venenos de los estados mórbidos: sentimientos de absurdo, de la nada, ideas de muerte, disgusto de, angustia, sadomasoquismo, culpabilidad, autocastigo, fobia, neurosis obsesiva...